
“Disparó y mató horrible e incomprensiblemente a 14 estudiantes y mató a un profesor”, aseguró el mandatario en una conferencia de prensa.
El sospechoso también mató a su abuela antes de ingresar al colegio y comenzar con el tiroteo, informó Abbot, que añadió que tenía en su poder una pistola y un rifle.
“Cuando los padres dejan a sus hijos en la escuela, tienen todas las expectativas de saber que van a poder recoger a su hijo cuando termine ese día escolar. Y hay familias que están de luto en este momento”, expresó el gobernador.
Es el tercer suceso similar que ocurre en menos de quince días en Estados Unidos, algo que genera una alta preocupación en la sociedad y en las autoridades nacionales.
El pasado 14 de mayo un adolescente Payton S. Gendron, un joven de 18 años autodefinido como supremacista blanco, abrió fuego en un supermercado de la localidad de Buffalo, Nueva York, y mató a diez personas.
Lo llamativo del caso es que el sujeto se colocó en su cabeza una pequeña cámara con la que transmitió en vivo por la plataforma Twitch.
El sujeto tenía planificado extender la masacre a otras latitudes de la ciudad, según informó el comisionado de la Policía de Buffalo, Joseph Gramaglia a la cadena estadounidense CNN: “Iba a subirse a su auto y seguir conduciendo por la avenida Jefferson para seguir haciendo lo mismo”.
En tanto que esta domingo un hombre mató a tiros a otro en el subterráneo de Nueva York, en lo que la policía consideró un aparente ataque no provocado.
De acuerdo a los testigos, el agresor desenfundó el arma mientras caminaba por el último vagón “y sin provocación sacó una pistola y la disparó contra la víctima a quemarropa”.
Fuente Ambito