Los Premios Rei Jaume I 2022 han distinguido a tres hombres y tres mujeres por su contribución a la investigación contra el cáncer y los incendios forestales, la detección y tratamiento de enfermedades genéticas, y la aplicación de las matemáticas para el desarrollo de las sociedades. Los ganadores de este año son José María Sanz Serna, en la categoría de Investigación Básica; Marta Reynal-Querol, en Economía; Antonio M. de Lacy Fortuny, en Investigación Médica; Emilio Chuvieco Salinero, en Protección del Medio Ambiente; Montserrat Calleja Gómez, en Nuevas Tecnologías; y Ángela Pérez Pérez, en el premio al Emprendedor. El veredicto del jurado, formado por un centenar de personas entre las que destacaban 21 premios Nobel, se ha dado a conocer este martes en un acto celebrado en el Palau de la Generalitat ante una numerosa representación del ámbito político y de la sociedad civil valenciana. A la 34 edición de estos galardones -dotados con 100.000 euros y que se entregan en otoño- se habían presentado 182 candidaturas, solo 33 de ellas de mujeres. El catedrático Jesús María Sanz Serna ha sido premiado, en la categoría de Investigación Básica, por sus trabajos pioneros en análisis numérico y sus implicaciones para las matemáticas y otros campos de la ciencia. «Sus contribuciones principales combinan técnicas de la teoría de la probabilidad, estadística, optimización e inteligencia artificial», ha indicado el presidente ejecutivo de los Rey Jaime I, Javier Quesada, durante la lectura del fallo. Por su parte, el jurado ha galardonado a Marta Reynal-Querol -Economía- por sus contribuciones a los determinantes de los conflictos bélicos, la economía política y el desarrollo económico utilizando metodologías basadas en experiencias históricas y «big data». Su contribución más importante es la caracterización de un índice de polarización aplicable a atributos discretos (etnia, religión, etc). En el campo de la economía política ha analizado la influencia del capital humano de los líderes políticos sobre el desarrollo económico. Su investigación reciente aborda la importancia del capital humano de los primeros colonizadores de América Latina y sus instituciones originales en la explicación del desarrollo económico. Su segunda gran línea de investigación en la actualidad es el análisis del desarrollo, los conflictos y la desigualdad usando técnicas de aprendizaje automático. En el ámbito de la Investigación Médica, el doctor Antonio de Lacy Fortuny, actual jefe del Servicio de Cirugía Gastrointestinal en el Hospital Clínic de Barcelona, recibe el premio por sus aportaciones en el tratamiento quirúrgico de los cánceres, sobre todo los cánceres colorrectales. «Son relevantes sus innovaciones en cirugías mínimamente invasivas, sus desarrollos de nuevas técnicas y sus demostraciones con ensayos con múltiples pacientes de la seguridad y ventajas de la cirugía laparoscópica del cáncer colorrectal. Ha desarrollado un programa de formación en la técnica sin precedentes, habiendo entrenado a más de 1.000 cirujanos de todo el mundo. Con su Advances in Surgery Channel ha creado la mayor plataforma mundial de educación quirúrgica», explican desde la organización. Premiada en la categoría Nuevas Tecnologías, la doctora Montserrat Calleja Gómez aplica los principales avances de la investigación básica en física a las innovaciones prácticas en el campo clínico. El jurado destaca su trabajo sobre marcadores biomoleculares y sensores nanomecánicos para la detección precoz de cáncer y enfermedades infecciosas, así como la identificación de la resistencia a los antibióticos, todos estos grandes retos en el campo de la salud humana. Emilio Chuvieco Salinero -Protección del Medio Ambiente- se suma a los galardonados como reconocido experto mundial en el campo de la teledetección y su aplicación a la localización y observación de incendios forestales. «Esta es un área de importancia crítica para comprender los efectos del cambio climático. Su trabajo ha extendido la aplicación de la geografía al análisis de la problemática compleja que relaciona el medio ambiente y el desarrollo humano. Esta información es crítica para el diseño y establecimiento de medidas de prevención de incendios en la creciente tendencia de calentamiento global», ha apuntado el jurado en su veredicto. Por último, en la categoría de Emprendedora, ha sido premiada la invetsigadora Angela Pérez Pérez, fundadora de Health in Code, que con 24 años decidió emprender en el ámbito de la biomedicina y el estudio de los genomas completos, en un «claro ejemplo» de transferencia de conocimiento al mercado. «Angela presenta una equilibrada combinación de su perfil científico, con sus habilidades de gestión de alto nivel, además de un talento innato para el emprendimiento. Health in Code es especialista en medicina preventiva, personalizada y de precisión, desde el diagnóstico de cualquier enfermedad genética que, en el 99% de los casos, son enfermedades raras. Uno de los lemas de la empresa es no dejar atrás a ningún niño o niña sin el mejor diagnóstico y tratamientos posibles», han destacado. Declaración contra la invasión de Ucrania
Antes dar comienzo las reuniones de cada categoría en Capitanía General de Valencia, los jurados de los Premios Jaume I han suscrito una declaración en la que exigen, «tras más de tres meses de atrocidades» en Ucrania, «la negociación inmediata de un alto el fuego, la retirada de los territorios ocupados y las reparaciones del daño infringido, junto con el compromiso de no utilizar jamás armas nucleares que conducirían a la devastación total de la vida humana en el planeta». Además, reiteran «la obligación de someter todos los avances científicos a usos que respeten la Declaración Universal de los Derechos Humanos». «Hoy, tras más de tres meses de atrocidades cometidas en un enfrentamiento desigual e injusto que no solo destruye el territorio, las familias, la gente inocente y compromete una posible crisis energética y alimentaria en el mundo, los jurados de los PRJI 2022 se adhieren todavía con más fuerza a la declaración de marzo de 2022», recalcan. En esta declaración del pasado 7 de marzo, más de 168 Premios Nobel de ciencia, economía, literatura y de la paz -entre los que figuran 40 laureados que han formado parte de los jurados de los Jaume I- firmaron un llamamiento a la paz en una declaración que condenaba la invasión y la guerra, la amenaza de recurrir al uso de armas nucleares y que exigía al presidente ruso Vladimir Putin el respeto a los acuerdos del derecho internacional, le conminaba a retirar sus fuerzas armadas y a iniciar negociaciones que condujeran al establecimiento de la paz.
Fuente ABC