
El helicóptero tiene una cámara de navegación que da evidencia visual de dónde está Ingenuity durante el vuelo o en tierra. Un algoritmo toma datos de estos instrumentos y los usa durante el vuelo, pero necesita conocer la actitud de balanceo y cabeceo del helicóptero, y eso es lo que proporciona el inclinómetro.
Como falló, el equipo tuvo que encontrar una manera de hacerse pasar por el inclinómetro, explica Havard Grip, piloto jefe de Ingenuity, en el blog de la misión.
Para resolverlo, aplicaron un parche de software al código que se ejecuta en la computadora de vuelo de Ingenuity. Intercepta lo que Grip describe como “paquetes basura” de datos y los reemplaza con buenos datos. Esencialmente, los controladores de vuelo engañaron a los algoritmos de navegación del helicóptero para que pensaran que los datos que tenían provenían del inclinómetro.
Según informa Universe Today, sorprendentemente, el equipo de vuelo anticipó que podría surgir algún problema como este y escribió el parche de software antes de tiempo. Ahora lo están aplicando y probando para asegurarse de que el parche hará lo que se supone que debe hacer. Si funciona, en unos pocos días marcianos, Ingenuity podría estar listo para el Vuelo 29.
El Perseverance lleva cuatro meses con una piedra en la rueda
Durante los últimos 4 meses, el rover Perseverance de la NASA en Marte circula junto a un compañero de viaje inesperado: una piedra en la rueda delantera izquierda recogida 8,5 kilómetros atrás.
Esta roca no le está haciendo ningún daño a la rueda, pero a lo largo de su viaje, se adhirió de tal manera que apareció de manera periódica en las imágenes de la cámara Hazcam izquierda.
Fuente Ambito