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Pese a las «muchas necesidades» de la provincia y al gran problema de la despoblación, el presidente de la Diputación de Zamora prefiere no perder el tiempo «en lamentos» y avanzar en propuestas concretas que «nos puedan convertir en un referente». Si este año la institución que preside se va a volcar en la feria mundial ‘Fromago’ para demostrar el potencial «de nuestros quesos y productores», presume también de haberse adelantado en la apuesta «industrial y tecnológica» por la ‘silver economy’, la de los cuidados a los mayores en uno de los territorios más envejecidos del país. En su vertiente más política, asegura que no pensó en dejar su cargo cuando PP y Cs ‘rompieron’ a nivel autonómico pese a ser él el único diputado provincial de su formación, mientras los populares cuentan con doce. Confía en que la formación ‘naranja’ «resurja de sus cenizas» y no ve imposible repetir presidencia. -El I Encuentro Mundial del Queso se celebra en Zamora a mediados de septiembre. ¿Qué espera de este acontecimiento para la provincia? -Lo que queríamos con esta iniciativa es posicionar el sector lácteo en Zamora, que es uno de los más importantes a nivel europeo, y a nuestros quesos y productores. Su implicación, la de la sociedad zamorana y la de las instituciones está siendo máxima. Tenemos unas estimaciones durante esos cuatro días -del 15 al 18 de septiembre- de cinco millones de impacto para la provincia y más de 200.000 visitantes. Pretendemos que Zamora sea un referente, que se nos conozca por nuestros quesos. Va a ser una gran fiesta con más de 300 puestos en un recorrido de más de dos kilómetros. -Usted dijo hace un año que «si esperamos a 2050, me temo que aquí no quedará nadie. El momento es ahora» refiriéndose a la despoblación. ¿Es hoy menos pesimista? -Soy optimista por naturaleza, pero también hay que ser realista porque tenemos índices muy negativos. Nosotros hemos apostado por convertir una debilidad que tenemos como es el envejecimiento en una fortaleza con la estrategia ‘silver economy’. Queremos que empresas tecnológicas vengan a nuestra provincia, asienten población, generen empleo y, sobre todo, proporcionen los mejores cuidados a nuestros mayores. He escuchado hablar de la despoblación desde hace tiempo en Madrid, pero pediría a todos esos organismos que vengan a Zamora, a Soria o a León y hablen con la gente del medio rural. En mi caso, creo que lo fundamental es atraer industria al territorio. En la Diputación estamos trabajando en bajar a cero el recargo provincial del Impuesto de Actividades Económicas, además de que hemos aumentado exponencialmente las ayudas a los emprendedores. -¿El anunciado reacuartelamiento de Montelarreina con la llegada prevista de cientos de familias será una solución para este problema? -Si algún día es una realidad será una ayuda, aunque no la panacea. Ahora mismo no sabemos nada de los anuncios que hizo el gobierno central -en palabras del presidente y durante la precampaña electoral autonómica-. Los trabajos iban a empezar rápidamente, pero nadie se ha puesto en contacto ni con este presidente ni con la Diputación. Nosotros anunciamos que pondríamos una partida importante para poder ayudar, pero más allá de los anuncios de prensa a los que nos tiene acostumbrados el PSOE no sabemos nada. Ojalá sea una realidad, pero a día de hoy soy bastante reticente. No tenemos visos de que se vaya a cumplir. -Otro proyecto que también parece que corre riesgo es el de la biorrefinería de Barcial del Barco. ¿Cuál es su diagnóstico de lo que sucede? -Por parte de la Diputación, lo primero que hicimos es ponernos en contacto con sus promotores. Les ofrecimos la solución de comprar unos terrenos y cedérselos para desarrollar el proyecto y es lo que hemos hecho. Estamos esperando a ver si solucionan los problemas de inversión. Sería una pérdida muy importante para la provincia si no sale adelante. -¿Le sorprende que este proyecto esté ahora judicializado? -Me sorprende siempre que se paran las cosas y más en una provincia necesitada de industria como la nuestra. Espero que todo se aclare, pero lo que me preocupa es que esté la inversión. -Son varios los responsables políticos provinciales que se quejan del trato de la Junta y el Gobierno. ¿Usted se une a ese lamento? ¿Considera que su caso es peor que otros? -Si perdemos tiempo en lamentarnos, lo perdemos en ser operativos. Yo no me voy a comparar con otras provincias, pero necesitamos ayudas de todas las administraciones. -Usted decidió quedarse al frente de la Diputación cuando el PP rompió con Cs para convocar elecciones autonómicas. ¿Llegó a pensar en dejarlo teniendo en cuenta que es el único diputado de Ciudadanos y que los populares son clara mayoría? -No. Aquí hay muy buena sintonía y una estupenda relación personal. -Es miembro del Consejo Autonómico de Cs. Sinceramente ¿qué futuro le augura a su partido? -Estamos en una situación difícil, pero en política de una semana a otra pueden cambiar mucho las cosas. Donde gobernamos se está haciendo un gran trabajo y eso lo van a valorar los ciudadanos. El partido ha perdido credibilidad y por eso estamos donde estamos, aunque creo que se puede resurgir de las cenizas. -¿Y piensa usted seguir en política una vez acabe la legislatura? -No lo tengo pensado. Estoy muy tranquilo porque tengo mi trabajo fuera de la política en una empresa familiar a la que volvería encantado. Debería ser obligatorio que un político tenga donde volver. -Pero repetir como presidente parece un imposible. -Complicado también era que el Real Madrid ganara la Champions. Todo es posible en política. Lógicamente cuatro años se te quedan cortos. Si al final no estamos nosotros, dejamos encaminados buena parte del trabajo. -¿A nivel 0, cómo cree que será la legislatura? -Espero que al menos haya estabilidad y que las política económicas sean positivas para la Comunidad y que tengan sensibilidad con Zamora.
Fuente ABC
