La batalla en el seno del Gobierno valenciano está servida. Si este viernes la vicepresidenta de la Generalitat, Mónica Oltra, ha reiterado que no piensa dimitir tras su imputación por la gestión del caso de los abusos sexuales a una menor tutelda por los que resultó condenado su exmarido, el presidente regional, el socialista Ximo Puig, le ha instado a que «reflexione y tome decisiones» por el bien del Gobierno de coalición que forman el PSPV-PSOE, Compromís y Podemos. Compromís ha amenazado con romper el pacto de gobierno si Ximo Puig decidía unilateralmente destituir a su vicepresidenta, consellera de Políticas Inclusivas y portavoz. El dirigente socialista ha aprovechado un pacto de su partido para replicar: «Los tiempos jurídicos y políticos a veces no coinciden». El presidente de la Generalitat Valencian, quien lamenta la falta de autocrítica de Oltra, afronta la peor crisis desde que accedió al cargo en el verano de 2015. De hecho, ha admitido que la imputación judicial de su «número dos» por el presunto encubrimiento de los abusos de su exmarido a una menor tutelada abre una situación «compleja» que necesita un «tiempo de reflexión» que ha apostado por abordarlo «desde la serenidad». «Hay que reflexionar y tomar decisiones”», ha expresado. Así se ha manifestado Puig en declaraciones a los medios a última hora de este viernes antes de participar en un acto del PSPV-PSOE en la localidad valenciana de Aielo de Malferit, y después de que Mónica Oltra haya descartado dimitir tras su imputación. El plan inicial de Puig pasa por esperar al resultado de la declaración como imputada de Oltra ante la Sala de lo Civil y lo Penal del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana. Sin emabargo, a día de hoy no se descarta ningún escenario después de que hasta seis pronunciamientos judiciales hayan puesto en entredicho la gestión de la Conselleria de Igualdad en el caso de los abusos sexuales a una niña cometidos por el exmarido de la vicepresidenta. Un nuevo «hito jurídico» Puig ha considerado que ahora, con este “nuevo hito” desde el punto de vista jurídico que supone la imputación de Oltra, se abre “un tiempo que reflexión y de tomar decisiones” y de “analizar la situación” de Oltra. En este sentido, ha mencionado al alcalde de Valencia, Joan Ribó, que ha considerado que la semana que viene debe haber una reunión en Compromís para “madurar la decisión” sobre el futuro político de Oltra, para expresar que “coincide” con él en la necesidad de establecer “un periodo de reflexión” porque “el interés del proyecto del Gobierno autonómico es un interés general que ha sido muy positivo para la Comunidad Valenciana”. Preguntado por una posible destitución de la vicepresidenta y portavoz de la Generalitat, Puig ha apostado por abordar la situación de Oltra con “serenidad” puesto que “los tiempos jurídicos y políticos a veces no coinciden”, como ocurre “en estos momentos”. “Entiendo las urgencias mediáticas y de la oposición, pero no son las de la Comunidad Valenciana, que hoy están en otro ámbito”, ha expresado, al tiempo que ha añadido que “hay que reflexionar”. En cualquier caso, el jefe del Consell, que ha defendido que la vicepresidenta “ha dado muchas explicaciones en sede parlamentaria y en los medios”, ha garantizado que tomará “siempre” las decisiones desde “el interés general de la ciudadanía de la Comunidad Valenciana”. Sobre la postura de la coportavoz de Compromís, Àgueda Micó, quien ha afirmado este viernes que si Puig fulminara a Oltra “evidentemente supondría una ruptura” del Ejecutivo valenciano, el presidente de la Generalitat y secretario general del PSPV ha insistido en que está en un “espacio de la serenidad” aunque “todo el mundo cuando está en política recibe legítimas presiones”. “Cada uno dice lo que piensa y cada uno es dueño de sus palabras y sus silencios”, ha sentenciado. Finalmente, preguntado por si ha hablado con Oltra sobre su imputación -la vicepresidenta este viernes ha asegurado que no ha hablado con él-, ha asegurado que habla “continuamente” con ella, aunque no ha especificado si lo ha hecho sobre este tema. De cualquier manera, ha subrayado que “no es un problema de incomunicación”.
Fuente ABC