El domingo comenzará el colapso. La celebración de la
cumbre de la OTAN alterará la normalidad de Madrid. El recinto ferial de Ifema, al norte de la ciudad, que acogerá la cita de la Alianza Atlántica; el paseo de la Castellana, donde se alojan las múltiples delegaciones internacionales; y la almendra central concentrarán el grueso de las afecciones y atascos. La portavoz municipal y delegada del Área de Seguridad y Emergencias, Inmaculada Sanz, hace días que avisa: «Son días complejos para la movilidad, pero Madrid está preparada para asumir esta cumbre histórica», ha repetido este jueves. El ayuntamiento ya ha tomado medidas. Este mismo jueves ha publicado en su Boletín Oficial (BOAM) la prohibición de instalar contenedores, sacos de residuos y material de obra en las calles en los puntos problemáticos. Las plazas de aparcamiento junto a los hoteles y otros entornos clave también estarán vetadas y reservadas para el medio centenar de delegaciones que participan en la cumbre. Y los autobuses de la EMT (Empresa Municipal de Transportes) serán gratuitos los días 28, 29 y 30 de julio «para facilitar a las personas que se tengan que mover, aunque es mejor no moverse en la ciudad», ha informado el alcalde José Luis Martínez-Almeida. El paseo de la Castellana será el epicentro del bloqueo. «Va a estar prácticamente cortado y bloqueado», ha afirmado Almeida. Las primeras afecciones serán este mismo domingo, por la convocatoria de la manifestación anti-OTAN. «Posiblemente, el día más complicado sea el 29», ha dicho la portavoz municipal. El resto de jornadas, el propio movimiento de las delegaciones saturará la Castellana, el paseo del Prado y otras vías transversales. «El eje central de la Castellana por momentos va a estar completamente cerrado», ha advertido. Despliegue sin precedentes
El colosal despliegue orquestado en el Palacio de Cibeles, en coordinación con el Ministerio del Interior, incluye «al menos» 2.000 efectivos municipales (agentes de movilidad, Bomberos, Samur-PC…), de los que 1.200 serán policías. Se encargarán de acompañar a las comitivas y de la seguridad externa en los hoteles. «No solo en los hoteles», ha precisado Sanz; también en el Palacio Real, en el Museo del Prado. Son los tres anillos de seguridad, en los que también participará la Policía Nacional, que impondrán restricciones en un radio de 3 kilómetros alrededor de Ifema, en el paseo de la Castellana y sus inmediaciones y en el corazón de la ciudad. El Ayuntamiento de Madrid recomienda no desplazarse durante estas jornadas críticas y, de hacerlo, en transporte público. Y teletrabajar. El consistorio ha elaborado una instrucción para que sus más de 7.000 trabajadores se acojan al teletrabajo. En cuanto al transporte, la Comunidad ya anunció una mayor frecuencia de autobuses y trenes
, así como el refuerzo de la línea 8 de Metro. El consistorio incrementará el paso de algunas líneas de la EMT, como la 104, y habrá una lanzadera específica desde Mar de Cristal a Ifema. «Va a haber que hacer modificaciones de recorridos, más que cortes», ha explicado Sanz, «las primeras horas de la mañana y las últimas horas de la tarde será más complicada la movilidad en superficie». Explicado el plan de seguridad, en la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno ha habido una última pregunta. —¿Se va a engalanar la ciudad? —Por supuesto que sí, dando la bienvenida a todos los mandatarios, con los colores de Europa.
Fuente ABC