Los banqueros se enteraron del nuevo impuesto sobre sus beneficios mientras asistían este martes a un acto con la ministra de Economía, Nadia Calviño. Nadie les había dicho nada sobre el inesperado anuncio del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en el Congreso de los Diputados. Tampoco la propia vicepresidenta, pese a que la medida les afecta directamente y ya les ha causado un fuerte castigo bursátil.
En su política de hechos consumados, el Ejecutivo se reunirá con el sector para explicarle las nuevas medidas la semana que viene. Y será la propia Calviño, que se ha convertido en ariete de Sánchez durante las últimas semanas, la encargada de dar la cara. El anuncio llega el mismo día en que la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, se reúne con las eléctricas para explicarles el hachazo fiscal que les afectará a ellas y pactar el plan de contingencia ante un posible cierre del grifo ruso.
Calviño ha anunciado este jueves que la próxima semana se reunirá con las patronales del sector financiero y los bancos. En declaraciones a RNE, ha señalado que el Gobierno está trabajando “en el detalle” de este impuesto, en su articulación técnica, con dos objetivos: cumplir con la meta de recaudación fijada (3.000 millones de euros en 2023 y 2024) y “minimizar cualquier fricción o impacto negativo” que pueda tener sobre los ciudadanos.
“El detalle lo estamos ahora trabajando. La semana que viene me reuniré con el sector. Vamos a trabajar bien desde el punto de vista técnico para que sea lo más adecuado posible. Se trata de que aquellos sectores que están teniendo beneficios extraordinarios en el contexto actual arrimen el hombro”, ha subrayado.
Calviño ha asegurado que el diálogo con la banca es constante y que tenía previsto convocarles este mismo mes de julio para abordar el problema de la inclusión financiera en el ámbito rural a fin de identificar carencias y posibles soluciones.
La vicepresidenta ha defendido el establecimiento de este nuevo impuesto recordando que “durante los años duros de la pandemia toda la sociedad apoyó al sector financiero“, por lo que ve “lógico” que los sectores que tengan beneficios extraordinarios también contribuyan a tener “un reparto justo del coste de la guerra”. “Estamos en un momento en el que todos tenemos que arrimar el hombro, el sector financiero no sufre especialmente el aumento de costes de la energía y de las materias primas, como sí ocurre en otros sectores industriales y, debido a la inflación, están aumentando los tipos de interés, lo que tendrá sus efectos positivos sobre sus beneficios”, ha aseverado Calviño.
La vicepresidenta ha negado que el establecimiento de este nuevo impuesto pueda hacer menos atractiva la inversión en España, pues “antes o después todos los países establecerán distintos tipos de mecanismos”. Así, ha recordado que España fue la primera en gravar los beneficios extraordinarios de las energéticas, viéndose entonces como una medida novedosa, pero que ahora, poco a poco, es un modelo que se está imponiendo en Europa. “España es un país muy atractivo para la inversión extranjera”, ha subrayado.
Al mismo tiempo, ha negado que este nuevo tributo pueda afectar al crédito que conceden las entidades financieras, pues sus balances están “saneados” y se han visto reforzados durante la pandemia con la movilización de 140.000 millones de euros de avales públicos. “[Esos avales] han evitado una crisis financiera y eso hace que sus balances estén saneados”, ha concluido.
Revisará al alza las previsiones de inflación
La vicepresidenta primera también ha anunciado este jueves que revisará “al alza” las previsiones de inflación cuando el Ejecutivo prepare los presupuestos generales del Estado (PGE) de 2023 y de cara al otoño, cuando remite toda la información a las instituciones europeas. Según la ministra, las estimaciones apuntan a que julio seguirá con el nivel actual de inflación, “alta y muy elevada”, con lo que se mantendrá en los dos dígitos, para después empezar a bajar tras el verano.
Los banqueros se enteraron del nuevo impuesto sobre sus beneficios mientras asistían este martes a un acto con la ministra de Economía, Nadia Calviño. Nadie les había dicho nada sobre el inesperado anuncio del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en el Congreso de los Diputados. Tampoco la propia vicepresidenta, pese a que la medida les afecta directamente y ya les ha causado un fuerte castigo bursátil.
Fuente El Confidencial