
“Lo que ocurrió representa un daño importante al ambiente, un animal silvestre más que se suma a yaguaretés, tapires, venados, osos meleros, y muchísimos más que son víctimas de una problemática que depende del respeto de las personas a las normas de tránsito”, apuntó.
Asimismo, la especialista remarcó que “la responsabilidad” de la muerte de este ejemplar de entre 45 y 50 kilos es “compartida y todos tenemos que ponerle un freno a esto”.
Según la organización ambientalista, el atropellamiento representa una “seria amenaza para la fauna de nuestro país, y los animales más perjudicados son los grandes depredadores como el yaguareté, ya que no solo los impacta directamente, sino que también se ven afectadas sus presas”.
En este marco, la organización aconsejó a quienes circulen dentro de áreas protegidas que la velocidad máxima es de 60 kilómetros por hora, norma que “debe ser respetada para resguardar el ambiente y por la seguridad de quienes viajan en los vehículos”.
“El receso invernal ya está dando muestras de un importante movimiento turístico en el país, lo que se traduce en mucho tránsito en las rutas, y en donde los atropellamientos de fauna se incrementan. Por ello es importante recordar la necesidad de respetar los límites de velocidad”, apuntó Lazzari.
Según un informe realizado por Vida Silvestre, en Misiones más de 5.000 animales mueren al año por esta problemática en rutas que atraviesan áreas protegidas.
“En los últimos años, los atropellamientos de animales silvestres toman notoriedad como una amenaza importante para la fauna de nuestro país”, aseguró Lazzari y agregó que “a pesar de las señalizaciones, el número del análisis que realizamos podría estar subestimado, ya que hay pocos registros de algunos grupos como anfibios, que son muy impactados, pero no son reportados”.
Fuente Ambito