
Las proyecciones del equipo técnico -sobre las cuales se basa el Banco Central para definir sus decisiones de política monetaria-, alejaron más la inflación de la meta oficial de largo plazo en Colombia, de un 3%.
“La nueva proyección sugiere que en el segundo semestre de 2022 la inflación continuaría elevada y finalizaría en un 9,7%, pero a lo largo de 2023 empezaría a ceder para cerrar el año en el 5,7%”, dijo el informe.
“Estos pronósticos están sujetos a una gran incertidumbre, especialmente alrededor del comportamiento futuro de los choques externos de costos, del grado de indexación de los contratos nominales y de las decisiones que se tomen en cuanto al precio interno de los combustibles“, agregó la autoridad monetaria.
El futuro gobierno analiza subsidios
El desbordamiento de los precios al consumidor -un factor mundial- es la razón fundamental por la que el Banco Central de Colombia incrementó en 725 puntos básicos su tasa de interés de referencia desde que inició el ciclo alcista, en septiembre del año pasado, hasta el actual 9%, su nivel más alto desde febrero de 2009.
El gobierno del entrante presidente Gustavo Petro fijó la inflación como una de sus prioridades más inmediatas, por lo que planea lanzar nuevos subsidios para los más pobres.
El próximo ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo, dijo la semana pasada que la capacidad de contener la inflación con alzas de tasas de interés es limitada, porque las razones del aumento de los precios están relacionadas con la oferta.
Además, el equipo técnico del Banco Central elevó su proyección de crecimiento del Producto Bruto Interno (PBI) a 6,9% para 2022 desde uno previo de 6,3%, aunque para el 2023 lo bajó a 1,1% desde un pronóstico anterior de 3,1%.
Fuente Ambito