De acuerdo a los médicos, Lugo poseía una malformación congénita, que es la que probablemente sangró. Primero se optó por una intervención por catéter, pero no se pudo llegar al hematoma por lo que se procedió a la cirugía.
El expresidente de Paraguay está internado en terapia intensiva, con coma inducido, en el sanatorio privado Migone, a donde llegó desde el sanatorio San Roque, que fue la institución que lo atendió inmediatamente luego de su descompensación en el Congreso.
Fernando Lugo, de 71 años, un exobispo que renunció al sacerdocio para dedicarse a la política, es uno de los líderes de la coalición de izquierda Frente Guasu.
Durante su presidencia (2008-2012) fue diagnosticado con linfoma de Hodgkin, del que se recuperó tras un tratamiento en Brasil.
Lugo fue removido de la presidencia de Paraguay en un polémico juicio político en 2012, tras un desalojo rural que enfrentó a policías y campesinos con un saldo de 17 muertos. Su vicepresidente, el liberal Federico Franco, ocupó el cargo hasta el final del periodo.
Fuente Ambito