Netflix fue una plataforma pionera en lo que respecta a la consolidación de ciertos servicios de streaming, ya que tuvo una visión de mercado bastante innovadora. Aunque también cometieron algunos errores en lo que respecta a la forma de consolidar algunos mercados que eran muy prometedores y que terminaron provocándoles un gran endeudamiento y pérdidas económicas.
Es en este sentido que últimamente Netflix ha estado perdiendo suscriptores debido a que han tomado decisiones de gestión que resultaron muy antipáticas. Además de que ya no cuentan con propuestas de contenido original tan atractivas, de manera que van perdiendo terreno frente a otras plataformas más innovadoras y mejor consolidadas en este sentido.
Por lo tanto, el panorama actual de esta plataforma en particular es bastante complejo. Así como también implica otros factores que le están poniendo presión para que tome un rumbo diferente o, de seguir así, podrían terminar en una quiebra inevitable.
Tarifas desiguales
Una medida reciente que anunció Netflix en América Latina (específicamente en 5 países: Argentina, El Salvador, Guatemala, Honduras y República Dominicana) fue cobrar extra por cada miembro que quiera usar otro dispositivo para conectarse a la plataforma. De esta manera, la cantidad de usuarios se medirá por las casas en las que se conecten, de manera que muchas cuentas compartidas con usuarios diferentes recibirán un costo adicional en el que cada miembro deberá pagar un extra.
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Esta medida no fue para nada bien recibida e incluso se tomó como una descortesía absoluta por parte de Netflix. De manera que muchos usuarios, ante un aumento que no habían considerado, decidieron dar de baja sus cuentas y las de sus amigos que compartían el servicio con ellos.
Pero también en otros países como Chile, Costa Rica y Perú se implementaron estas medidas de segmentación de tarifas por usuarios y de cobro extra con el nombre de “Agregar una casa”. De manera que es un modelo de negocios que se va difundiendo cada vez más.
Contenido cada vez menos atractivo
Con el surgimiento de nuevas plataformas masivas, estas comenzaron a reclamar los derechos de su contenido y, en consecuencia, Netflix fue perdiendo títulos clásicos que les pertenecían a otros medios, como Disney o HBO, por ejemplo. Es por esta razón que muchos suscriptores que eran fanáticos de algunas series o contenido particular, al no encontrarlo más en Netflix, dejaron de pagar el servicio.
Asimismo, otro factor que ocurre es que hay una sobreabundancia de series que no tienen un público destinado. De manera que el contenido de mejor calidad se pierde entre todo ese “relleno”, por lo que es cada vez más difícil encontrar algo para ver que resulte atractivo.
Pero también hubo algunos éxitos que remontaron la imagen de Netflix y que, según los directivos de la compañía permitieron mantener suscriptores. Uno de estos éxitos, sin lugar a dudas, fue Stranger Things, la serie del momento. Así como también pudo serlo El juego del calamar anteriormente. De manera que hay ciertos intentos por remontar la imagen y el contenido de Netflix.
Aumentos en las tarifas de base
Los precios de Netflix en América Latina varían debido a que se deben ajustar a las monedas locales y hay ciertos países con una inflación mayor a las que son medidas en Estados Unidos, donde se encuentra registrada la empresa. De manera que se complica la tasación y hay aumentos más frecuentes.
Pero donde están la mayor cantidad de suscriptores de Netflix es en los países con mayor poder adquisitivo, como Estados Unidos, Canadá, Reino Unido y los países europeos. Una suscripción estándar en EE. UU. cuesta unos USD 15. 5, que aumentó de 14 en enero de este año y de 11 en 2019. De manera que se puede percibir una tendencia en alza constante.
Por su parte, en Reino Unido, los aumentos fueron mayores en porcentaje, ya que se estima de 1 libra por mes, de manera que pasaron de £6.99 en enero de este año a £10.99 en la actualidad. Ante estos aumentos, muchos suscriptores dijeron basta y cancelaron por completo sus servicios.
Sumado a estos aumentos, si además quieren implementar el modelo de segmentación tarifaria que comenzaron a implementar en América Latina, podrían perder incluso más suscriptores. Por lo que este momento puede ser crítico para la empresa si no se toman las decisiones correctas.
Un enfoque de contenido con demasiada crítica social
Muchas personas también le adjudicaron a Netflix la creación de contenido con demasiada “carga social”. Esto se entiende como representaciones queer, etnodiversas y de minorías.
En principio, este tipo de contenido tiene como propósito atraer a un público más diverso, pero también tuvo un efecto adverso, ya que grupos más reaccionarios lo vieron como una afrenta y dejaron de ver contenido en absoluto. Así como también muchos grupos se sintieron mal representados, de manera que esta decisión tampoco dejó satisfechas a las personas a las que se suponía que estaba dirigido.
Es por estos motivos que, en la actualidad, están realizando muchas campañas diversas que resultan incluso contradictorias a veces. De manera que no se puede tener un criterio unificador al respecto de todo el contenido disponible en Netflix.
Un cambio de rumbo necesario
De seguir por este camino, indudablemente,
irá perdiendo cada vez más público y suscripciones. Esto producirá un ciclo negativo en el que contarán cada vez con menos presupuesto para llevar a cabo producciones propias y, al no poder ofrecer contenido de calidad, perderán cada vez más suscriptores.
Por lo tanto, en definitiva, de no revertirse esta tendencia negativa, podríamos estar enfrentándonos al comienzo del fin de Netflix como lo conocíamos. De forma que esto puede ser muy relevante a futuro.
Fuente Big Bang News