La tasa de inflación interanual de la zona euro se situó en julio en el 8,9%, frente al 8,6% registrado en junio, en lo que supone el mayor encarecimiento de los precios en la región del euro de toda la serie histórica y más de cuatro veces la meta de estabilidad de precios del 2% del Banco Central Europeo (BCE), según ha confirmado la oficina comunitaria de estadística, Eurostat. Para proseguir en su lucha contra la inflación, la máxima autoridad bancaria de la Unión prepara una nueva subida de los tipos de interés.
La subida de medio punto que el BCE acometió en julio no ha mejorado la perspectiva inflacionaria, de acuerdo con las palabras de Isabel Schnabel, que pertenece al consejo ejecutivo del organismo, en la entrevista realizada por Reuters.
En el conjunto de la Unión Europea (UE), la tasa de inflación interanual del séptimo mes del año alcanzó un nuevo máximo histórico del 9,8%, dos décimas por encima de la lectura de junio. En julio de 2021, la subida de los precios entre los Veintisiete fue del 2,5% interanual.
Factores de presión para el BCE
Los elevados precios no se desvanecerán a corto plazo, e incluso se podrían acelerar más, de acuerdo con Schnabel. “Varios indicadores apuntan hacia un elevado riesgo de desanclaje de las economías”, prosigue. Asegura que en septiembre se tomarán las decisiones necesarias según los datos que lleguen, y lamenta que las preocupaciones del mes de julio no hayan podido ser aliviadas.
Las declaraciones de Schnabel son una guía para el comportamiento futuro del BCE con respecto a los tipos, después de que los legisladores comunitarios decidieran dejar de dar a entrever el tamaño de las subidas venideras, el mes pasado.
El peor escenario inflacionista dio pie a actuar con mayor contundencia en la última reunión que previamente habían comunicado, lo que desencadenó un debate sobre si comprometerse de antemano es lo adecuado cuando la incertidumbre es elevada.
La escalada de los precios de la zona euro se intensificó en el séptimo mes de 2022, a pesar de que la subida interanual del precio de la energía se desaceleró al 39,6% desde el 42% de junio, mientras que el incremento del precio de los alimentos frescos en julio fue del 11,1%, cuando en junio había sido del 11,2%. Sin embargo, los servicios se encarecieron un 3,7% interanual en julio, tres décimas más que el mes anterior, mientras que los precios de los bienes industriales no energéticos subieron un 4,5%, frente al 4,3% del mes anterior.
Al excluir del cálculo el impacto de la energía, la tasa de inflación interanual de la zona euro se situó en julio en el 5,4%, frente al 4,9% del mes anterior, mientras que al dejar fuera también el efecto de los precios de los alimentos frescos, el alcohol y el tabaco, la tasa de inflación subyacente se ha situado en un récord del 4%, tres décimas más que en junio.
El Consejo de Gobierno del Banco Central Europeo (BCE) decidió en su última reunión, celebrada en julio, subir los tipos de interés en 50 puntos básicos, en su primera subida del precio del dinero desde 2011, además de advertir de que acometerá más subidas en próximas reuniones.
Superior al 10% en media UE
En el mes de julio, un total de 16 países de los 27 que forman la UE registraron subidas de precios de doble dígito, incluyendo 10 de los 19 miembros de la zona euro.
En el caso de España, la tasa de inflación armonizada se situó en julio en el 10,7%, frente al 10% de junio, ampliando el diferencial de precios desfavorable respecto de la media de la eurozona a 1,8 puntos porcentuales.
La tasa de inflación interanual de la zona euro se situó en julio en el 8,9%, frente al 8,6% registrado en junio, en lo que supone el mayor encarecimiento de los precios en la región del euro de toda la serie histórica y más de cuatro veces la meta de estabilidad de precios del 2% del Banco Central Europeo (BCE), según ha confirmado la oficina comunitaria de estadística, Eurostat. Para proseguir en su lucha contra la inflación, la máxima autoridad bancaria de la Unión prepara una nueva subida de los tipos de interés.
Fuente El Confidencial