El líder que puso fin a la Guerra Fría falleció en Moscú a los 91 años.
El último dirigente de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas, Mijaíl Gorbachov, que puso fin hace más de treinta años a la Guerra Fría, falleció en Moscú a la edad de 91 años, justo cuando su país ha renovado su antagonismo con Occidente.
El Kremlin no tardó en expresar el «profundo» pesar del presidente ruso, Vladímir Putin, por la muerte de Gorbachov, que dirigió la URSS entre marzo de 1985 y su desaparición en diciembre de 1991.
Paradójicamente, la muerte le llegó a pocos meses de que se cumpla el centenario de la fundación de la URSS por Lenin en diciembre de 1922, cinco años después de la Revolución Bolchevique.
En Israel, el primer ministro Yair Lapid señaló a Gorbachov como “un líder valiente y un gran estadista, que contribuyó en gran medida a la rehabilitación de las relaciones entre su país e Israel y abrió las puertas de la Unión Soviética a la gran ola de inmigración judía a Israel en la década de 1990”.
«Fue una de las figuras más extraordinarias del siglo XX. Fue un líder valiente y visionario, que dio forma a nuestro mundo de maneras que antes se creían inimaginables. Me enorgulleció conocerlo durante su visita a Israel en 1992. Sentimos condolencias a su familia y amigos», afirmó, por su parte, el presidente israelí Isaac Herzog.
Fuente Aurora