Esta alza de temperatura es casi el doble de lo anticipado para otras áreas del planeta, y sería más veloz que en cualquier otra parte habitada del mundo, indicaron los expertos.
El informe, preparado bajo el auspicio del Instituto Max Planck de Química y el Centro de Investigación del Clima y la Atmósfera del Instituto de Chipre, se presentará en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP27) que tendrá lugar en Egipto en noviembre.
Una combinación de lluvias reducidas y el calentamiento del clima contribuirá a sequías severas, comprometiendo la seguridad hídrica y alimentaria, y muchos países no estarán preparados para el aumento del nivel del mar, dijo uno de los expertos.
“Este (escenario) implicaría graves desafíos para la infraestructura costera y la agricultura, y puede conducir a la salinización de los acuíferos costeros, incluido el delta del Nilo, densamente poblado y con cultivos”, dijo el doctor George Zittis del Instituto de Chipre, autor del informe.
El cumplimiento de los principales objetivos del Acuerdo de París, un pacto global de países para reducir las emisiones, podría estabilizar el aumento de la temperatura anual en unos 2 grados centígrados.
Los científicos recomiendan una rápida implementación de acciones de descarbonización, con un énfasis particular en los sectores de energía y transporte.
“Dado que muchos de los resultados regionales del cambio climático son transfronterizos, es indispensable una mayor colaboración entre los países para hacer frente a los impactos adversos esperados”, dijo Jos Lelieveld, director del Instituto de Química Max Planck, profesor en el Instituto de Chipre y coordinador del estudio.
Fuente Ambito