El presidente del interbloque de Juntos por el Cambio en el Senado de la Nación, Alfredo Cornejo (UCR- Mendoza), disertó en el Foro Internacional “20 años de la Fundación Internacional para la Libertad: Democracia y Libertad”, que preside Mario Vargas Llosa y se realiza en Madrid, España.
El exgobernador de Mendoza, integró el panel “Retos y oportunidades de América Latina”, donde compartió visiones con el exsecretario general de Sebastián Piñera, Cristian Larroulet; el exdiputado peruano, Enrique Ghersi; el presidente del Business Forum de México, Roberto Salinas León.
También compartió el encuentro con el exjuez de Brasil Sergio Moro, quien fue ministro de Justicia luego de encabezar la operación Lava Jato; con el presidente de Uruguay, Luis Lacalle Pou, y el titular de la Fundación Internacional para la Libertad (FIL), el Premio Nobel de Literatura Mario Vargas Llosa, entre otros.
“Si uno observa los últimos procesos electorales y repasa quién gobierna cada uno de los países de América Latina, daría la sensación de que hay una nueva ola de gobiernos populistas”, comentó Cornejo y aclaró que, sin embargo, esta “nueva ola” no es tan fuerte como la anterior de Hugo Chávez, Néstor Kirchner, Evo Morales y Lula, entre otros.
Además, remarcó que quienes se consideran “herederos de esa tradición no lo son tanto desde la práctica y en muchos casos han tenido que reordenar sus agendas de gobierno”. También explicó que este fenómeno político “no se dio en apoyo a sus propuestas”, sino que han sido resultado de las “dificultades de quienes los precedieron en sus cargos en cuanto a la falta de resolución de problemas económicos y sociales”.
Como consecuencia, el senador sostuvo que los “estados populistas contaron con una gran billetera para ampliar el gasto público”, y dijo que la situación actual es “distinta” y puso como elementos detonantes también a la post pandemia y la invasión de Rusia a Ucrania las cuales “generaron serias dificultades en el intercambio internacional, lo que dificulta a los países a aprovechar una época de suba de precios de materias primas”.
Además, puso el acento en que la inflación en alza en el mundo en general y en algunos países en particular: “Implica también un gran problema a la hora de engordar el gasto público sin hacer explotar definitivamente la macroeconomía, pese a que algunos países –como la Argentina- parecieran ir en esa dirección”.
El senador señaló que estos datos le hacen pensar que esta nueva ola de populismos no será sostenida en el tiempo. “Veo un escenario de cambios más que de estabilidad de los populismos”, aseguró.
Cornejo afirmó que “quienes creemos en el sistema republicano y en la democracia liberal, no podemos solamente ver con esperanza la posibilidad de que los gobiernos populistas sean derrotados electoralmente, ni tampoco solo podemos conformarnos con eso”, y agregó que es necesario que se pase de una reacción a la acción que “podamos ofrecer no solo alternativas electorales sino también un plan de gobierno sólido y una gestión eficaz”.
Así como lo ha mencionado en numerosas sesiones del Senado de la Nación, el senador advirtió que algunos países como la Argentina necesitan “con urgencia” reformas en lo laboral, previsional e impositivo y dijo que esto sólo se puede concretar con poder político y la consolidación de un Estado fuerte que lidere los cambios. “Los vientos de cambio van a ayudar a que podamos hacerlo, pero debemos hacerlo con decisión, convicción y honestidad”, expresó.
Cornejo también puso el acento en que “los populismos son claramente imprecisos en su filosofía y en sus conceptos. Nosotros debemos ser muy directos y por cada concepto también proponer una solución”, y citó a Vargas Llosa en el prólogo de “La llamada de la tribu” que “Los liberales queremos un Estado firme y eficaz, lo que no significa un Estado grande, empeñado en hacer cosas que la sociedad civil puede hacer mejor que él en un régimen de libre competencia. El Estado debe asegurar la libertad, el orden público, el respeto de la ley, la igualdad de oportunidades”.
Asimismo, afirmó que es necesario conducir estos estados con competencia y eficacia para dar satisfacción a las necesidades de los ciudadanos: “Una economía sana y pujante para que los ciudadanos se desarrollen en libertad, aprendiendo en las escuelas, transitando seguros las calles y abandonando de una vez el elogio absurdo del pobrismo y la demonización de la riqueza”.
Fuente Mendoza Today