Como parte de un proceso en el que ya se han celebrado varias reuniones, el gobierno de Biden busca implementar un programa donde pueda intervenir en las redes sociales para censurar sin inconvenientes.
La noticia más importante del año acaba de estallar en Estados Unidos. Documentos filtrados por el medio The Intercept demuestran que el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) de Biden está trabajando con empresas de redes sociales y del sector financiero para censurar noticias negativas que perjudican la imagen del gobierno demócrata.
La bomba provino del fiscal general del estado de Missouri, Eric Schmitt, quien presentó una demanda contra el gobierno federal por la censura de noticias durante la elección de medio término que tendrá lugar el próximo 8 de noviembre.
Según los documentos filtrados, que incluyen mensajes de texto y correos electrónicos entre altos funcionarios del gobierno de Biden, la agencia CISA, dependiente del DHS, fue reformada en agosto del año pasado por la administración demócrata para presionar a distintas empresas a que censuren publicaciones, usuarios y las cuentas bancarias de diversas personas.
Twitter, Facebook, Goolge y hasta el JP Morgan han mantenido reuniones semanales con funcionarios de CISA donde se traen distintas publicaciones o personas y se analiza entre ambas partes su censura.
De acuerdo a los documentos, el DHS ha pedido censurar millones de publicaciones relacionadas con los los orígenes de la pandemia de COVID-19 y la eficacia de las vacunas de COVID-19, la “justicia racial“, la retirada de Estados Unidos de Afganistán y la naturaleza del apoyo de Estados Unidos a Ucrania.
Otra de las noticias que al día de la fecha sigue siendo suprimida por pedido del gobierno de Biden es el contenido de la laptop de la computadora portátil de su hijo, Hunter Biden, donde se encontraron fotos, videos y correos electrónicos donde se demuestra varios delitos, desde tráfico de influencia hasta compra de drogas ilegales.
Como la clasificación de “desinformación” no está claramente definida en la misión de CISA, el contenido censurable es extendible a cualquier idea y opinión que contradiga la narrativa oficial de la administración Biden.
Facebook creó una página para que el gobierno elimine publicaciones
El nivel de influencia del gobierno federal en las decisiones de las empresas de redes sociales llegó al punto de que Facebook creó una extensión de su sitio web para que agentes de CISA puedan acceder directamente para pedir bajas de contenido, sin tener que pasar por las reuniones semanales que se llevaban a cabo previamente.
En una presentación enviada al DHS, se explica que se creó un subsitio del “Content Request System”, llamado “Government Reporting System“, para que los agentes federales puedan acceder con sus propias credenciales y pedir la eliminación de manera automática.
La página facebook.com/xtakedowns todavía está online a pesar de que esta información salió a la luz, probablemente porque falta una semana para las elecciones donde Biden se juega el futuro de su gobierno y no quiere arriesgarse a dejar de moderar el contenido que sale en redes sociales.
El gobierno de Biden intentó hacer pública parte de esta infraestructura en abril de 2022 con el anuncio de la creación de la Junta de Gobernanza de la Desinformación. Nunca se aclararon las funciones exactas de la junta, ni cómo cumpliría su objetivo de definir y combatir las fake news, pero fue tanta la opinión negativa que generó que tuvieron que cerrarla a los pocos días.
Ahora sabemos que la cerraron tan fácilmente porque todas las tareas que estaría cumpliendo públicamente, la agencia CISA ya lo estaba haciendo de manera confidencial y con el apoyo de varias empresas.
En la tanda de documentos obtenida se ven minutas de reuniones entre los agentes federales y empresas de redes sociales y del sector financiero. Por ejemplo, en una reunión celebrada en marzo con ejecutivos de Twitter y del JP Morgan, Laura Dehmlow, funcionaria del FBI, advirtió que la amenaza de información “subversiva” en las redes sociales podría incrementar el descontento de los ciudadanos con el gobierno. “Necesitamos una infraestructura de medios de comunicación que rinda cuentas”, subrayó Dehmlow en la reunión.
También hay mensajes de texto de febrero enviados por el ejecutivo de Microsoft Matt Masterson a un director del DHS donde se muestra frustrado de que otras empresas se muestren reticentes de aceptar la intervención del Estado. “Las plataformas tienen que sentirse cómodas con el gobierno. Es realmente interesante lo indecisos que siguen siendo”, expresa.
El origen de la agencia que Biden utiliza para censurar las redes sociales
En una decisión de la que seguro se arrepiente, el 16 de noviembre del 2018, Trump firmó un proyecto de ley recientemente aprobado por el Congreso donde se creaba oficialmente dentro del DHS una oficina federal llamada Agencia de Ciberseguridad y Seguridad de las Infraestructuras (CISA).
La ley fue redactada y aprobada en respuesta a una serie de hackeos de alto perfil de empresas estadounidenses como SolarWinds y Equifax por parte de China. En el texto de la ley, se especifica que el objetivo de esta agencia es proteger la infraestructura cibernetica crítica del país.
Sin embargo, en agosto del 2021, por decreto, Biden le otorgó nuevos poderes y objetivos a la agencia, como por ejemplo proteger a Estados Unidos de la “desinformación” en redes sociales y asistir al FBI en combatir la radicalización online.
El decreto de Biden estuvo respaldado por un comité de los jefes legales de las principales empresas tecnológicas, encabezado por Vijaya Gadde, la ahora ex jefa de asuntos legales y política de Twitter y responsable de la maquinaria de censura de la empresa, echada la semana pasada por Elon Musk tras adquirir la compañía.
Gadde fue la co-autora de un informe en junio en el que se instaba a la CISA a asumir un papel protagónico en la vigilancia de la libertad de expresión en línea, pidiendo a la agencia que “vigilara las plataformas de medios sociales de todos los tamaños, los medios de comunicación convencionales, las noticias por cable, los medios hiperpartidistas, la radio y otros recursos en línea“.
Fuente Derecha a Diario