La transformación de la vida cotidiana, de los hábitos informativos, las prácticas culturales y los modos de relacionarnos, son algunos de los interrogantes surgidos en la pospandemia, que un grupo de investigadores de la Universidad Nacional de San Martín (UNSAM) decidió relevar para tratar de entender qué es lo que ocurrió tras los meses de aislamiento por el coronavirus.
La encuesta indagó también sobre la percepción de las personas acerca de la estrategia de vacunación que llevó adelante el Gobierno nacional, cómo se construye en la actualidad la interacción social en forma presencial y hasta cómo nos saludamos y compartimos rondas de mate.
A más de dos años del inicio de la pandemia, según el informe, más del 50% de las personas encuestadas reconoció que prefiere saludar con el puño y no compartir el mate, si bien los porcentajes varían según el género, la edad y el lugar de residencia y de clase social.
En tanto, más del 65% asegura que volvió a concurrir a lugares cerrados y el 63% respondió de forma negativa acerca de la cobertura que hicieron los medios de comunicación sobre la pandemia.
El estudio se realizó junto al Programa interdisciplinario de investigación PASCAL durante todo el mes de junio último y sobre una muestra aleatoria, estratificada y balanceada según la distribución poblacional, y estuvo dirigida a mayores de 16 años y residentes en el Área Metropolitana de Buenos Aires.
Para evaluar los comportamientos en función de la reapertura de espacios, en la encuesta se preguntó si durante los últimos seis meses (entre enero y junio de 2022) habían asistido a cines, teatros, recitales, bares o restaurantes, museos o centros comerciales.
La opción más elegida fueron los bares y restaurantes con el 65%, seguida por la opción de los shopping o centros comerciales, a los que volvió el 58% de los encuestados.
En cuanto a otras salidas, en particular a espacios culturales, el 56% respondió que volvió a ir al cine después de la pandemia, el 39% asistió a un museo o centro cultural, el 35% volvió a asistir al teatro y el 33% asistió a un recital.
En contraste con los espacios cerrados que implican un mayor riesgo de contagio, se valoriza la opción de salir a parques y plazas (el 71,8% volvió a frecuentarlos), así como también a clubes con espacios al aire libre (el 53,1% volvió a asistir en los últimos seis meses).
Dos de las integrantes del equipo que llevaron adelante el estudio, Brenda Focas y Marina Moguillansky, ambas investigadoras del CONICET y profesoras de la escuela IDAES UNSAM, contaron en diálogo con Noticias Argentinas que la idea de investigar sobre los consumos culturales, audiencias y sociabilidad en la pospandemia, surgió al pensar a la pandemia del coronavirus “como un fenómeno multidimensional”.
“Partimos de preguntarnos qué había cambiado en cuanto a los consumos culturales, la relación con las pantallas y la sociabilidad. Nos interesaba saber cuáles o cuánto de esos cambios se iban a instalar y sospechábamos que la mayoría de las cosas que habían cambiado se iban a revertir. Sobre todo los cambios que implicaban aislamiento, mayor soledad, más distancia corporal”, comentó Focas.
Y agregó: “Como premisa para pensar el cuestionario entendíamos que la pandemia tenía que pensarse como un fenómeno multidimensional, sobre el cual hubo experiencias muy disímiles entre distintas personas, y que esas vivencias estarían relacionadas con la posición política fundamentalmente, y nos preguntábamos también si estarían condicionadas por el género, la situación socioeconómica, la edad”.
Al referirse a cuál fue el resultado que más les sorprendió tras el relevamiento, Moguillansky indicó que fueron las respuestas que la gente dio sobre la estrategia de vacunación que llevó adelante el Gobierno nacional.
“Nos interesaba contextualizar un poco las respuestas y tener un perfil más global de cada sujeto. Suponíamos que era uno de los puntos que se iba a evaluar positivamente, más allá de la posición política de los individuos, porque teníamos datos objetivos que ubicaban a la Argentina en una buena posición (avance de la vacunación con respecto a otros países, tasa de cobertura, ranking de posiciones a nivel mundial, etc)”, comentó.
Y destacó: “Otro resultado que nos sorprendió fue que cuando preguntamos por las fuentes con las que se informan, les nombrábamos por ejemplo la televisión, los portales digitales, la radio, los diarios, las redes sociales y les pedíamos que se posicionaran entre “Nunca”, “Algunas veces por mes”, “Algunas veces por semana”, “Todos los días”. Y la categoría con la frecuencia más alta de respuesta en todos los casos fue “Nunca”. También la frecuencia alta de personas que se siguen saludando con el puño, que siguen usando el barbijo y que no comparten el mate también nos resultó bastante sorprendente“.
Otros de los puntos de la encuesta fue el tratamiento de la información durante ese período: ante la afirmación “los medios transmitieron información correcta y útil durante la pandemia“, el 35,3% estuvo nada de acuerdo, el 27,9% poco de acuerdo, el 17,8% bastante de acuerdo, y el 9,3% muy de acuerdo. “Si se suman las dos primeras opciones podríamos decir que el 63,2% evaluó de forma negativa la cobertura de la pandemia que realizaron los medios de comunicación”, resalta el informe.
Y ante la pregunta, ¿cuál te parece más confiable como fuente de información?, el 38% señaló a los medios nacionales, el 24% a los medios internacionales, el 15% a los científicos, el 13 al gobierno, y el 10% a las redes sociales. “Si cruzamos esta información con voto, los datos muestran que el 22% de los que confiaron en la información del Gobierno, votaron al oficialismo en las últimas elecciones, mientras que la confianza cae entre quienes votaron a la oposición: solo el 1% confió en la información oficial sobre la pandemia”, señala el informe, y concluye: “Los datos muestran que los oficialistas confían más en medios nacionales mientras que los opositores en los internacionales. Estos datos refuerzan el panorama antagónico del sistema mediático y la polarización en relación con el consumo de información durante la pandemia”.
Fuente Mendoza Today