Piedra París. Construcción de estilo francés y con menos de 10 años de antigüedad. Única y espectacular. En Acassuso está la casa que desplazó a Los Abrojos como sede familiar de Mauricio Macri, donde recaló desde que dejó la presidencial de la Nación.
De estilo francés, amplio parque y alquiler en dólares, la vivienda es el lugar de encuentro del otrora jefe de Estado con sus invitados más preciados.
De hecho, en estos días, aprovechando las celebraciones por el aniversario de los Pactos de la Moncloa de 1977, Macri avanza en reuniones con diversos referentes de la política, no solo local sino también de España.
Quien se coló allí, según la inefable pluma de Ignacio Zuleta, uno de los periodistas mejor informados del país, es Rodolfo Suarez. quien habría cenado este domingo en Acassuso, junto a dirigentes como Alfonso Prat Gay, Rogelio Frigerio, Fulvio Pompeo, Martín Migoya y alguno más.
Allí, según refiere el columnista de Clarín, habrían avanzado en analizar los pactos que en España permitieron terminar con la grieta y desembocaron en la conformación de una nueva Constitución, en el año 1978.
¿Se puede hacer algo así en la Argentina? ¿Hay posibilidad de dejar de lado los egos y buscar la comunión entre los antagónicos partidos que dominan las preferencias del país? Es lo que busca desentrañar Macri con estas tertulias, en las cuales aparece Suarez como invitado de lujo.
Ciertamente, no es nada nuevo: como publicó Diario Mendoza Today el pasado 10 de octubre, “Macri disparó una serie de reuniones apenas regresó de España con los radicales que gobiernan. El jueves lo visitó Rodolfo Suarez”.
La única duda que persiste a esta altura es: ¿Por qué el gobernador de Mendoza no blanquea estos encuentros? ¿Teme acaso quedar salpicado por los coletazos de la feroz interna radical?
Fuente Mendoza Today