Todas las culturas del mundo suelen ver con una mirada despectiva a quienes nacen y tienen todo servido en bandeja desde la cuna, ya sea porque pertenecen a las burocracias cercanas al poder en cada país o porque la condición de “hijo de” es la principal causa de que las puertas se le abran y que les llegue la buena fortuna.
Así pues se subestiman a príncipes, hijos de figuras políticas y hasta a los futbolistas que aparecen con un apellido de su padre a hacer sus primeras armas en el deporte profesional, para que luego sean grandes dirigentes y referentes en lo suyo.
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Aunque pocas veces se habla de la dificultad que significa criarse en entornos tan expuestos y vivir con la carga de ser un heredero de alguien famoso o destacado en nuestra sociedad. Y la verdad es que es un fenómeno muy real, que muchas veces termina teniendo feos desenlaces.
En BigBang realizamos un repaso de muchos de los descendientes de grandes figuras de Hollywood, que pasaron por momentos tormentosos por no poder soportar la mochila que llevaban sus padres. Porque muchas “tener todo servido”, puede significar no encontrar el camino en la vida y perderse buscándolo.
Cameron Douglas
El hijo mayor de Michael Douglas, y nieto del emblemático Kirk que protagonizó -entre otras gemas- Spartacus en 1960, tuvo una vida de excesos muy similar a la que su padre confesó en relación a su adicción al sexo, pero aunque en el caso de él fue con las drogas.
Primero en 1999 lo encontraron con cocaína en el distrito neoyorquino de Manhattan, aunque pudo salvarse de la causa judicial tras confesar su culpabilidad. Luego en 2007 lo encontraron con una jeringa con la misma sustancia, pero en estado líquido, por lo que fue nuevamente detenido.
Esos dos primeros avisos no lograron convencer a Cameron que por ese camino no iba hacia buen puerto, por lo que tuvo que pagar con la prisión luego de que en 2009 lo encontraron con media libra de metanfetamina, una cantidad suficiente como para que su pena en prisión sea vinculada al narcotráfico.
Sus conflictos siendo parte del sistema penitenciario norteamericano no pararon por algunos años, en los cuales tuvo muchas veces prisión domiciliaria, sobre todo luego de que otro recluso le rompiera su pierna. Su padre se reconoció públicamente como un “mal padre”, por la realidad de su hijo. Aunque también confesó que, en caso de no caer detenido, “iba a estar muerto o alguien iba a matarlo”, por lo que creyó que así tenía “la oportunidad de empezar una nueva vida”.
Finalmente en 2016 saldría de prisión y lograría mantenerse limpio hasta hoy, que pudo rearmar su vida y que tiene dos hijos con su pareja, la actriz y profesora de yoga Viviane Thibes. Su padre contó a la revista People que en algún momento creyó que lo perdía, por lo que hoy debe estar muy feliz celebrando que esté limpio, feliz y en familia.
Charlie Sheen
Este caso es quizás el más paradójico de la lista, porque es uno en el cual el hijo terminó siendo más conocido que el padre. Si bien Martin Sheen fue una altísima figura de Hollywood y un actor destacadísimo por todos sus pares, la popularidad que adquirió su hijo Charlie Sheen en los años que se destacó como actor de comedia en muchas películas y en la inolvidable serie Two and a Half men, donde la rompió como Charlie Harper, fueron una catapulta absoluta hacia la parte desgraciada de la fama.
Es que en aquel show donde fue reemplazado por Ashton Kutchner en 2011, llegó a ganar hasta 1,8 millones de dólares por capítulo, transformándose en el actor mejor pago de la televisión norteamericana.
En ese éxito que protagonizó junto a Jon Cryer, quien hacía del hermano correcto de la relación, logró su pico más alto en cuanto a popularidad y exposición, y lo mantuvo durante muchos años. Aunque no logró aguantar la presión.
“Charlie no se veía muy bien cuando comenzamos la octava temporada en otoño de 2010: demacrado, pálido, con la piel cetrina e incluso sudoroso ocasionalmente. Empezó a hablar consigo mismo. Más que nada se veía más flaco, y no de una buena manera”, contó su compañero en sus memorias. “Ya no acertaba al hacer sus bromas como solía hacerlo. Una vez, durante los ensayos para coreografiar los movimientos de una escena él preguntó ‘¿puedo quedarme parado junto a este sillón?’ Quería sujetarse a este en lo que duraba la escena”, profundizó.
En ese camino de descontrol fue que se encontró con una de las noticias más fuertes que le tocó recibir, cuando en 2015 informó a la sociedad que era VIH positivo y que lo sabía desde 2011. Justo el año en el cual lo despidieron del emblemático show. Lo bueno de esta mala noticia fue lo que se conoció como efecto Charlie Sheen, que consistió en un crecimiento de la búsqueda de información en Internet acerca de la enfermedad.
Jaycee Chan
El hijo del actor, acróbata y artista marcial Jackie Chan, tuvo que enfrentar a la ley, pero no en los Estados Unidos, sino en China, donde fue detenido en 2014 por “proporcionar un espacio para el consumo de droga”, tras ser encontrado en su casa de Pekín fumando marihuana con otras personas.
La ley norteamericana puede ser rigurosa, pero en este caso la china lo era aún más, ya que por el delito podía llegar a recibir una pena de hasta tres años, e incluso existían quienes hablaban de pena de muerte. Esa realidad no terminó siendo tan negativa, ya que finalmente un tribunal lo condenó a seis meses de prisión. Aunque sí fue dura, según contó con sus propias palabras.
Lo más paradójico de todo esto era que su padre había sido embajador de buena voluntad antidrogas de China desde 2009, lo que complicaba aún más su situación. Luego de cumplir su pena, finalmente se hizo pública una carta de arrepentimiento por todo lo malo que había generado en sus personas cercanas lo que había ocurrido y confesó que había roto la ley durante ocho años de consumo de drogas, una realidad penada y contemplada de otra manera en la milenaria cultura asiática.
Lo cierto es que los días que ocurrieron entre el 14 de agosto de 2014 y el 13 de febrero de 2015, Jaycee los pasó entre las rejas y sin ayuda de su padre, como supo confesar. “Después de esta corrección por parte de la justicia, he cambiado mi visión de la vida y mis valores”, precisó en la carta. Su carrera como actor se interrumpió a partir de ese evento´.
Indio Falconer Downey
Otro de los que tuvo problemas con las drogas fue el hijo de Robert Downey Jr., aquel actor que desde muy joven deslumbró en papeles como el que hizo en la biopic de Charles Chaplin, pero que hoy es reconocido por millones de niños como Tony Stark, el hombre detrás de la armadura de Iron Man de Marvel Comics.
Y también su heredero los pagó con la ley, pero con una rigurosidad más del estilo occidental, con verdes. Es que en 2014 fue detenido por posesión de cocaína. Tenía sólo 20 años y su padre se acercó a pagar su fianza para que salga, la cual llegaba a los 10 mil dólares.
A partir de ese día tuvo que sumarse a un programa contra las adicciones y desde aquel entonces tuvo varias recaídas, hasta que encontró en la música una pasión que lo haga superar “la carga genética” de la cual habló su padre cuando fue detenido aquella vez.
Es que el actor que protagonizó las superproducciones de los Avengers, también tuvo muchos idas y vueltas con la Justicia norteamericana por su relación con las drogas y el alcohol, tal como confesó ante los tribunales en 1999, cuando describió su adicción con una contundente frase: “Es como tener un arma cargada, en la boca y el dedo en el gatillo, sabes que en cualquier momento se va a disparar pero te gusta el sabor del metal del arma”.
El padecimiento venía de larga data, ya que con los años Robert pudo contar que su relación con las drogas venía desde que él tenía ocho años, cuando probó la marihuana con su padre y sintió ese momento como algo especial y como una renovación de la relación con él. La traumática experiencia descolocó a todo el mundo del espectáculo alrededor del planeta, por la crueldad de la experiencia.
Que tanto él como su hijo se encuentren limpios y en buenas condiciones de salud, es un gran noticia para ellos luego de haber padecido tanto dolor por sus costumbres nocivas. Una realidad que al día de hoy aún se mantiene sin recaídas.
Fuente Big Bang News