¿Una recesión mundial en ciernes? Algunos expertos proyectan una crisis para 2023

“Es probable que la economía mundial se enfrente a una recesión el próximo año como consecuencia de las subidas de los tipos de interés en respuesta a la alta inflación”. Esa es la previsión del británico Centro de Estudios sobre la Economía y los Negocios (CEBR, por sus siglas en inglés), en palabras de su director de pronósticos, Kay Daniel Neufeld.

Según un informe del CEBR, la batalla contra la inflación “no se ha ganado todavía”, lo que indica que los bancos centrales se mantendrán “firmes” en el endurecimiento de la política monetaria, por mucho que esto conlleve costes en la economía y el mercado laboral. Unos costes que llevan a esbozar unas perspectivas de crecimiento más pobre o, incluso, recesión, en los años venideros.

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Las conclusiones del centro de estudios británico son más pesimistas que las del Fondo Monetario Internacional, que en octubre advirtió de que había un 25% de posibilidades de que el PIB mundial creciera menos del 2% en 2023, lo que sería implicaría una recesión global.

Del estudio del CEBR se desprende también una conclusión para nada baladí: China ya no está en disposición de superar a Estados Unidos como primera potencia económica mundial a corto plazo. Según estos expertos, la política de “covid 0” de Pekín, recientemente desmantelada, habría retrasado el esperado ‘sorpaso’. Así, Washintong en cabeza hasta 2036, cuando hasta hace no tanto se creía que esto pasaría con el cambio de década.

Asimismo, el informe prevé que Reino Unido se mantenga como sexta economía mundial durante los próximos 15 años, si bien creciendo a un menor ritmo que las potencias europeas. Esto lo achacan a la “ausencia de políticas orientadas al crecimiento”, así como a la “falta de una visión clara de su papel” una vez han abandonado la Unión Europea.

“Es probable que la economía mundial se enfrente a una recesión el próximo año como consecuencia de las subidas de los tipos de interés en respuesta a la alta inflación”. Esa es la previsión del británico Centro de Estudios sobre la Economía y los Negocios (CEBR, por sus siglas en inglés), en palabras de su director de pronósticos, Kay Daniel Neufeld.