PARÍS.- Yevgeny Prigozhin volvió al ataque. Como lo hace desde hace semanas, el dueño de la milicia mercenaria Wagner acusó hoy otra vez a los responsables de las Fuerzas Armadas rusas de “traición” y lanzó una advertencia apocalíptica al Kremlin.
“Si Wagner se retira ahora de Bakhmut, toda la línea de frente se derrumbará. Caerá hasta las fronteras de Rusia. Incluso hasta más allá. En otras palabras, la situación no será de las más agradables”, aseguró en un video, donde se lo ve en ropa de fajina, aparentemente dentro de un búnker.
ARCHIVO – Yevgeny Prigozhin, jefe de la fuerza militar privada conocida como Grupo Wagner, acude al funeral de Dmitry Menshikov, un combatiente de su fuerza que murió durante una operación especial en Ucrania, en el cementerio Beloostrovskoye en las afueras de San Petersburgo, Rusia, el sábado 24 de diciembre de 2022.
¿Amenaza o reclamo por anticipado de los laureles por una posible conquista de la sitiada ciudad de Bakhmut? El “cocinero de Putin” –como se lo conoce en Rusia–, cuyos hombres están en primera línea en el este de Ucrania, volvió así a quejarse de la falta de municiones, atribuyendo las demoras a una posible “traición”. “Las órdenes para el envío fueron impartidas el 23 de febrero. Hasta hoy, no ha llegado casi nada”, declaró Prigozhin en un mensaje anterior, publicado el domingo pasado. En él, evoca dos razones posibles: “La burocracia ordinaria o la traición”.
Hace unas semanas, había sido aun más brutal: “Obuses hay. Pero es necesario que politiqueros, cabrones y basuras pongan su firma para que nos sean entregados”, dijo.
Utilizando el término “hambruna” para describir la penuria de municiones, Prigozhin advirtió que sin ellas y sin la posibilidad de reclutar hombres en las cárceles Wagner deberá retirarse del frente, permitiendo el avance ucraniano y un eventual derrumbe del frente ruso.
En esa guerra interna que libran Wagner y los jefes militares, todos los golpes parecen permitidos. Prigozhin no solo no recibiría las municiones que necesita, sino que el Ministerio de Defensa le habría prohibido hace semanas seguir con su programa de reclutamiento de prisioneros, que la organización envía al frente como carne de cañón, reservando sus combatientes profesionales para operaciones más sofisticadas.
Address to Zelensky by the leader of the Wagner group.
For almost a year western media asserted “Who takes Bakhmut wins the war”. Bakhmut is about to fall.
How will Zelensky answer for the thousands of lives he sacrificed in one of the bloodiest meat grinders of the modern… https://t.co/UWCDFEnDiM pic.twitter.com/h9hBSuzagZ
— John Mappin (@JohnMappin) March 6, 2023
Sus violentas críticas contra las Fuerzas Armadas comenzaron el mes pasado. Sobre todo, contra el ministro de Defensa, Sergei Shoigu, y el jefe del Estado Mayor, Valeri Guerasimov, quienes, a su juicio, son los responsables de esa “traición”.
Para los observadores, teniendo en cuenta que después de seis meses sus paramilitares no consiguen hacer caer la emblemática ciudad de Bakhmut, la nueva estrategia propagandística de Prigozhin tendría como objetivo hacer responsables a los líderes militares rusos de la eventual derrota de sus hombres.
Su milicia privada representa un cuarto de los combatientes rusos en Ucrania. A mediados de diciembre, la Casa Blanca había estimado sus efectivos en unos 50.000 hombres: 10.000 mercenarios y 40.000 hombres reclutados en las prisiones rusas. Gracias a su número y a su influencia actual, “es evidente para nosotros que Wagner se está convirtiendo en una potencia rival para el Ejército ruso”, estimaba entonces Washington. Muchos observadores se preguntan, por el contrario, si esas tensiones son signo de una verdadera rivalidad dentro de las fuerzas militares rusas presentes en el frente.
“Prestamos mucha atención al juego personal de Prigozhin, pues quisiéramos que esas disensiones políticas fueran reales”, fustiga el general e investigador Olivier Kempf.
A su juicio, es difícil creer que Wagner enfrenta auténticas dificultades de aprovisionamiento, cuando la relación de fuego da claramente la ventaja a los rusos en Bakhmut. En todo caso, el líder de Wagner ha decidido hacerse ver. Contrariamente a Shoigu o a Guerasimov, se muestra todo el tiempo junto a sus hombres, en uniforme de combate.
“Incorpórense al ejército privado más fuerte del mundo. Defiendan su patria. Hagan frente a la Tercera Guerra Mundial como verdaderos hombres”, arenga en un video. En Instagram, el grupo indica que tiene oficinas de reclutamiento abiertas en “cerca de 30 ciudades de Rusia”, para voluntarios de 22 a 50 años, y promete un salario de 2900 euros con “bonos de performance”.
Una furgoneta de la policía ucraniana conduce por la carretera para la evacuación de civiles en Khromove, cerca de Bakhmut , Ucrania, el sábado 4 de marzo de 2023.
Como sucedió en la ciudad mártir de Mariupol, también en Bakhmut las milicias de Wagner están en primera línea. Y al igual que sus adversarios ucranianos, el grupo ha sufrido enormes pérdidas en la batalla.
Hasta hoy, Wagner proseguía el asedio de esa localidad, defendida empecinadamente por las fuerzas ucranianas. Según las últimas informaciones, hoy por la mañana, estas últimas habrían terminado de evacuar la orilla este del río Bakhmustovska, que separa la ciudad en dos.
“Ahora comenzarán a evacuar el centro. Ya reforzaron las instalaciones para mantener el último corredor que va hacia el oeste y replegarse en orden”, dice el general Dominique Trinquant.
Pero aquellos que piensan que la caída de Bakhmut será un gran triunfo ruso podrían equivocarse. “En realidad, los ucranianos lograron concentrar todas las energías rusas en esa pequeña ciudad durante seis meses, lo que les permitió prepararse para la gran contraofensiva de los próximos meses”, agrega Trinquant. Y concluye: “Obviamente, la toma de Bakhmut será aprovechada por Prigozhin para obtener rédito político. Pero, en verdad, habrá sido un triunfo ucraniano”.
Fuente La Nacion