El mes de Ramadán comienza en los territorios de la Autoridad Palestina.
Por Noa Shusterman
Como en años anteriores, existe la preocupación en el estalishment de seguridad de que este período sea el telón de fondo de una escalada en Cisjordania y Jerusalén Este, que incluso puede extenderse a la Franja de Gaza.
Si bien la mayoría de los palestinos dedican este período a una conexión más fuerte con la religión y la oración, y si bien también es un mes para pasar un tiempo en familia, este período va acompañado de una tendencia hacia el extremismo religioso y el nacionalismo.
El miedo ahora es mayor porque el año pasado hubo un aumento en los casos de terrorismo y el surgimiento de nuevas organizaciones de jóvenes palestinos, como La Guarida del León [Lion’s Den] en Nablus; estos están ganando popularidad entre el público en general.
Otros factores de escalada incluyen la intención del ministro de Seguridad Nacional de continuar demoliendo casas en Jerusalén Este durante las vacaciones y los presos palestinos que iniciarán una huelga de hambre durante el mes de Ramadán.
Un empeoramiento de las condiciones de los prisioneros, imágenes de demoliciones de casas o un aumento significativo en el número de judíos que visitan el Monte del Templo durante la Pascua pueden no solo despertar el deseo de venganza de los palestinos individuales que buscan llevar a cabo acciones contra los israelíes, sino también presionar a Hamás para que responda desde la Franja de Gaza.
Precisamente ahora, cuando la Policía de Israel se enfrenta a múltiples tareas como resultado de las crecientes protestas contra la coalición, se recomienda evitar las provocaciones, tanto a nivel retórico como práctico (como la evacuación de una familia de once miembros en Sheikh Jarrah) , y aumentar la cooperación con los aparatos de seguridad palestinos para prevenir el terrorismo.
Si bien la suposición predominante es que actualmente, la probabilidad de una intifada (es decir, un levantamiento popular generalizado) es baja y que Hamas no desea participar en una campaña contra Israel, el potencial de escalada es alto y existe el temor de una repetición de los eventos de [la operación] Guardián de las Murallas, que también incluyeron disturbios en las ciudades con poblaciones mixtas árabes y judías.
Fuente: INSS The Institute for National Security Studies
Fuente Aurora