Con gran expectativa, la Comisión de Juicio Político de Diputados recibió en la reunión de este martes a Héctor Marchi, quien fue administrador general de la Corte Suprema durante los últimos 15 años y tuvo a su cargo a partir del 2021 la supervisión de la Obra Social, ante la cual denunció que desde su desplazamiento él y personal cercano están siendo “víctimas de seguimientos y amenazas”.
Además, se despachó con dureza contra los jueces del máximo tribunal Horacio Rosatti, Juan Carlos Maqueda y Carlos Rosenkrantz, dejando expuesta la fuerte grieta que existe en el seno de la Corte entre Lorenzetti y los restantes tres miembros del máximo tribunal. Asimismo, asoció al juez Juan Carlos Maqueda con la gestión de la obra social del Poder Judicial, sobre la cual recaen denuncias sobre presuntas irregularidades.
El funcionario judicial fue recientemente desplazado por el voto de la mayoría de los jueces del máximo tribunal. Por el voto de Rosatti, Rosenkrantz y Maqueda –Ricardo Lorenzetti se opuso-, Marchi fue apartado de su cargo y trasladado al fuero de la Seguridad Social días atrás y advirtió que su salida fue una “sanción encubierta” contra su persona.
Desde el oficialismo, la presidenta de la comisión, Carolina Gaillard, denunció públicamente que Marchi se aprestaba a enviar a la comisión una serie de auditorías e información recopilada en el denominado “informe Marchi” -de 20 mil fojas- sobre serias irregularidades en el manejo de los fondos de la OSPJN, justo cuando fue desplazado.
En el arranque de la reunión, Gaillard recordó que “en la Acordada 11/23 de reestructuración funcional hay una disidencia del doctor Lorenzetti donde menciona que el contador Marchi habría elevado un informe sobre la obra social y que eso podría estar vinculado a su desplazamiento”. Por eso, “se entendió que era lógico” convocarlo a la comisión, argumentó.
A continuación, informó que “afortunadamente, en el día de ayer, la Corte se expidió y ha contestado el oficio que esta comisión le requirió enviando toda la información”. Sin embargo, “teniendo en cuenta que esta información llegó anoche y no va a ser posible poder estudiarla con detenimiento, se lo va a volver a citar (a Marchi) para que venga a otra reunión”, que se realizará el próximo jueves 4 de mayo (atento que el martes 2 no habrá reunión por el feriado del día anterior).
Antes de pasar a la ronda de preguntas, Gaillard le aclaró: “Lo hemos citado para el día de hoy porque a raíz de la acordada 11/23 esta comisión se notificó a partir de la disidencia del doctor Lorenzetti que usted había elevado un información que la comisión había requerido a la Corte y pedimos que sea enviada con 24 horas y fue recibida anoche a última hora”, por lo que le solicitó a Marchi su presencia la próxima semana porque “mucha de esa información no la hemos podido verla en detalle y con precisión y profundidad que queremos”.
El funcionario confirmó su presencia manifestando: “No tengo ningún problema, me parece totalmente lógico porque son 20 mil fojas, cuatro informes, un acta final, 30 recomendaciones y me parece muy prudente y beneficioso que todos ustedes lo puedan leer en profundidad y se puedan discutir adecuadamente”.
Previo a las preguntas, pidió hacer algunas salvedades: “Quiero dejar en claro que la situación en la que vengo a declarar es en el marco de una demanda civil que yo tengo con la diputada (Elisa) Carrió. La causa se encuentra en trámite. Públicamente ustedes saben que yo he pedido dos recusaciones por el tiempo transcurrido porque me parecía un tiempo totalmente prolongado cuatro años y medio paradas las causas cuando, en realidad, en instancias anteriores se demoró menor tiempo, una de ellas fue rechazada en menos de 24 horas y la otra fue rechaza cambiando la jurisprudencia”.
“Si bien son cuestiones que acepto como los fallos como debe ser, como este juicio lo voy a seguir en tribunales internacionales y con el mayor respeto a la exdiputada Carrió, me voy a tomar reserva de algunas cuestiones porque tiene que ver también con el Juicio Político hacia el juez Lorenzetti que me incluye en donde las denuncias formuladas tienen que ver, en su mayor parte, con esta demanda que está en trámite con el agregado del tema de la obra social en donde estoy señalado puntualmente y en donde me gustaría dar las respuestas que correspondan”, planteó.
Marchi denunció que “en este tiempo, luego de que esta situación tomó estado público, se han producido un montón de hechos que tienen que ver mi persona. No me refiero solo a haber dividido una Secretaría General de Administración, que está en toda su facultad la Corte de hacerlo, pero si en un traslado que yo lo considero una sanción totalmente encubierta en donde la secretaría que se ha dividido y la sanción que se ha aplicado incluyen a todas las personas que hemos trabajado en la Auditoría de la Obra Social.
“Yo he sufrido seguimientos, hay amenazas contra funcionarios que han colaborado conmigo y hay cuestiones que realmente ya exceden el marco de un tema tan particular como es el tema de la Obra Social y que genera mucha presión en mí, pero no me impide en venir y contar la verdad y ayudarlos a avanzar con este tema tan importante”, afirmó.
El testimonio
Fue el diputado kirchnerista Leopoldo Moreau el encargado de abrir el interrogatorio preguntándole respecto a su llegada a la Corte, a lo que Marchi contestó que fue por su trayectoria y aclaró: “No soy kirchnerista ni de cambiemos porque en las distintas etapas de los gobiernos he sufrido pintadas de que era de uno o de otro y tuve bravas discusiones con todos judicialmente, pero siempre defendiendo los intereses del Poder Judicial”.
“Recibí un llamado de Lorenzetti cuando yo estaba a cargo de la Secretaría de Hacienda de mi provincia. A partir de mi gestión en Santa Fe me propuso la idea de charlar con todos los ministros de la Corte de venir a trabajar en temas presupuestarios y económicos que estaban totalmente olvidados en la Corte Suprema”, contó e indicó que fue director en el 2007, en el 2008 estuvo como subadministrador acompañando un mes a Nicolás Reyes.
En esa línea, recordó que al llegar la Corte Suprema tenía un estado muy “difícil. No estaban ni los foquitos de la entrada. Lo primero que hice fue poner iluminación para que haya transparencia. Había fondos de presupuestarios, no había un circuito administrativo armado y no había una estrategia financiera armada”.
“Todos los ministros me pidieron algo, pero especialmente el doctor Carlos Fayt me dijo si tenía la suficiente fuerza para defender al Poder Judicial fuera del Poder, pero por sobre todo dentro para arriba y para abajo. Yo me comprometí con el doctor en hacerlo y me dijo que si no lo hacía no podía seguir estando en el Poder Judicial y menos en la Corte. Esa fue mi llegada”, relató Marchi y aclaró que durante 16 años trabajó los miembros de Reyes y lo acompañaron con el manejo del dinero “todas mujeres, no tengo hombres dentro de la administración que manejen el presupuesto. Estoy honrado de que mujeres hayan hecho tan hermoso solamente con la estrategia que fijé, me duele cuando se duda del trabajo realizado”.
Y volvió a denunciar que “la administración que realizamos ha sido desguazada y he sido trasladado, en lo cual los funcionarios están siendo amenazados”.
El funcionario precisó que en 2015 se suprimió la Secretaría General de Gestión y las áreas se unieron a las de la Secretaría General de Administración. “Se hizo para buscar mayor eficiencia y evitar menores costos”, explicó y criticó que “tenemos menos personal a pesar de las áreas creadas. La planta de personal habilitada es de 4.700 empleados, y la ocupada es de 2.500 o sea que está prácticamente en la mitad, la mitad de los cargos están vacantes y parte de la política de responsabilidad fiscal obedece a eso”.
Por otro lado, informó que las acordadas antes de su resolución tenían que pasar por todas las áreas competentes dependiendo del tema que se trataba. “Esa era la costumbre por solemnidad se tenía que hacer”, remarcó y alertó que “esa formalidad hoy en día no se respeta totalmente”.
“Hay muchos cambios que a mi me generan dudas como por ejemplo que la mesa de entrada de la Secretaría General de Administración pase a la Secretaría General de Asuntos Jurídicos. Se destruyeron todas las auditorías vigentes”, planteó el santafecino comentó que “nadie” habló con él respecto a su desplazamiento.
Al ser consultado por Moreau sobre la Supervisión en la Obra Social explicó que el sistema “venía de un deterioro que hizo explosión en pandemia. En ese momento Maqueda, que estaba a cargo, me llamó y me preguntó cuáles eran los principales problemas que podría haber ahí. Para mi el problema era con los prestadores que tenían aranceles muy bajos y por otro lado que había un grave problema al no tener un sistema informático. Ahí se creó la Comisión de Informatización Judicial de la Nación de la cual fui presidente. A los cuatro meses entregamos un proyecto para licitar un software de gestión general para que la Obra Social le agregue sus especificaciones, pero no pasó nada y los problemas aumentaron. Ahí me designaron y se hizo un diagnóstico de donde salió la acordada y di las recomendaciones de lo que se podía hacer. Ese fue el primer informe”.
Al respecto, indicó que en dicho informe destacó los tres problemas que detectó: de tipo orgánico donde había un directorio unipersonal que tomaba las decisiones y delegaciones a personas para tomar actos importantes; había cargos vacantes de mucha importancia y las locaciones de servicio. “Aconsejé que se incorporara a un contador y a un abogado del Poder Judicial porque son los que más conocimientos tienen de lo que es la Obra Social”, contó.
“La Obra Social cuando yo ingresé estaba fundida, no tenían ni para pagar los sueldos”, lanzó Marchi y destacó que la Secretaría General de Administración logró salvar la Obra Social.
Además, sostuvo que hubo tres meses de 2021 donde “se produjeron los tres primeros informes. El primero era un diagnóstico, el segundo avanzaba con el primero y el torcer informe marca una serie de deficiencias en la obra social. El informe cuarto fue entregado a la presidencia y recibido por Silvio Robles”.
“Robles era el vocero de Rosatti dentro de la Corte, él hablaba con los directores y era una cuestión con la que yo no estaba muy conforme. La manera de manejarse de esta persona llevaba indicaciones a los directores de parte de Rosatti o de parte de los tres ministros, cosa que no me consta y por lo que algún ministro me ha reclamado no le entregó el informe cuatro”, describió.
Por otro lado, explicó que el Fondo Anticíclico de la Obra Social firmada por los siete ministros de la Corte se creó a partir de los excedentes que se generaron a partir de la política de salarios altos. “Los ministros determinaron que parte de ese dinero pase a la Corte Suprema y fue el directorio de la Obra Social el que fijó el montó para transferir. Eso no implica manejar la Obra Social porque queda con su dinero para manejarse”, precisó y opinó que la Obra Social en materia de gestión financiera “es un desastre” porque “hay remanentes de 10 mil millones en cuentas corrientes porque no hacen los plazos fijos y eso remunerado en 8 meses implica perder 3 mil millones de pesos para la obra social”.
“Esta Auditoría que estuvo unos años, lo que hicimos fue detectar todas las falencias de una Obra Social en todos los sentidos para mejorarla para 100 mil afiliados que se merecen un mejor servicio de salud”, planteó el administrativo.
En suma, el funcionario subrayó que Maqueda supervisaba y estaba la tanto de todos los actos que se realizaban. “El doctor Tonón le llevaba todas las cuestiones para que se autoricen porque nada se hacía sin la autorización de Maqueda. Cualquier movimiento en la Obra Social tenía que ser autorizado por él. Hay un cúmulo de erogaciones que tiene que ver con la compra de medicamentos de compra directa sin expedientes, sin dictámenes, solamente con una orden de arriba”.
“Tonón, a propuesta de Maqueda, fue presidente de la Obra Social. Él empezó como auditor de la obra social”, aseguró el contador y afirmó que Maqueda estuvo “casi 10 años como responsable de la Obra Social”.
En una breve interrupción, la oficialista Mara Brawer le solicitó al testigo que expliqué qué informe no entregó Robles y a quiénes.
“Primero hubo reticencia a aceptármelo. Nadie quería recibirlo al informe cuatro, lo mandé de prepo a presidencia y lo recibió el señor Robles. Al doctor Lorenzetti no se lo mandó. No me consta si se lo mandó a los demás, pero obedece al grado de informalidad con que se está manejando la Corte porque si todo fuese por los carriles normales, no ocurrirían este tipo de cosas. El traslado que han hecho de mí, luego de mostrarles cómo está la administración, obedece al informe cuatro que está la punta del ovillo porque involucra al doctor Altave que fue propuesto por Rosatti y Robles lo escondió, por más amenazas que tengo, pero lo voy a decir”, denunció.
“La informalidad llegó para quedarse en la Corte. El informe cuatro es el ovillo y generó mi trasladó. También hubo otro tipo de informalidades a las que me opuso porque se usaron aparatos por fuera de mí y de mi administración. Es muy grave. En diciembre el señor Robles eliminó el mail del presidente de la Corte y dio la orden al director de sistema que manden todo al mail de él”, planteó.
Fuente Mendoza Today