MADRID, España.- Este miércoles ha sido noticia en el mundo el asesinato al político y periodista Fernando Villavicencio, declarado opositor del exmandatario Rafael Correa y aspirante a la presidencia de Ecuador.
Villavicencio, que al morir tenía 59 años, fue reconocido por sus investigaciones sobre la corrupción durante la administración de Correa. Reveló algunos de los casos más polémicos en este sentido que sirvieron para armar los juicios contra el expresidente ecuatoriano.
En 2014 fue condenado a 18 meses de cárcel por “difamación”, y huyó a la Amazonía ecuatoriana, antes de recibir asilo en Perú. Regresó a Ecuador cuando Rafael Correa dejó el cargo.
En mayo pasado, tras anunciar que se postularía a la presidencia para evitar que volviera el correísmo, dijo en una entrevista con la agencia EFE que Ecuador vive “una maqueta de democracia”.
Asimismo, había asegurado que, de alcanzar la presidencia, combatiría “las mafias políticas que están vinculadas al narcotráfico y a estructuras delictivas de minería ilegal, y también estructuras corruptas en el sector público”.
Además consideraba que el país “había llegado a un punto en el que hablar de inversión significa desmantelar estructuras criminales”, e insistía en que para reactivar la economía había que “derrotar a las mafias, lideradas principalmente por los cárteles de la droga”.
El periodista, nacido en la ciudad ecuatoriana de Alausí, en 1996 ingresó a Petroecuador, primero como comunicador social y luego como sindicalista hasta 1999. Colaboró con varios medios, entre ellos El Universo y en la revista Vanguardia.
Su carrera política la inició en las elecciones de 2021, cuando fue elegido asambleísta nacional por la Alianza Honestidad.
Asesinado a tiros este 9 de agosto tras participar en un mitin político en Quito, Villavicencio era una figura política prominente que ocupaba la cuarta o quinta posición en la mayoría de las encuestas para las elecciones del 20 de agosto próximo.
El ataque contra Villavicencio se produce en un momento crítico, con apenas 11 días restantes hasta las elecciones, en un país que ya se encuentra en medio de una crisis sin precedentes. Durante la actual campaña electoral, otras figuras políticas han sido víctimas de violencia extrema.
Fuente Cubanet.org