El enviado especial de Estados Unidos, Amos Hochstein, voló a Beirut, con una ajustada agenda que incluye una visita a Jerusalén, en el contexto de la creciente tensión en la frontera entre el Líbano e Israel.
De acuerdo con los reportes, el funcionario norteamericano visitará una plataforma de gas en el Bloque N°9, como así también Beirut y Naqoura, la localidad del sur libanés donde los cascos azules de las Naciones Unidas tienen su cuartel general.
Hochstein abrirá negociaciones entre Israel y el Líbano sobre el trazado de la frontera.
“No me torturen como en las negociaciones sobre la frontera marítima” pidió Hochstein a sus contrapartes en el Líbano, según el diario Al Akhbar, afiliado al grupo terrorista chií libanés Hezbollah.
Fuentes occidentales revelaron al diario libanés Ad Diyar que el Departamento de Estado norteamericano quiere resolver las disputas fronterizas entre Israel y el Líbano, tras el éxito en la demarcación de la frontera marítima el año pasado.
Según el Líbano, hay al menos 13 puntos de disputa entre el país del cedro e Israel, con un posible nuevo punto promovido por el diario afiliado a Hezbollah, la semana pasada.
Hoy, miércoles a las 17 horas, las Naciones Unidas tienen programado votar la extensión del mandato de la FPNUL (Fuerza de Paz Provisional de las Naciones Unidas en el Líbano) en el sur libanés. Hezbollah se opone y el Gobierno de Beirut exige cambios.
Por su parte, el ministro de Defensa, Yoav Gallant, instó a el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, a “actuar inmediatamente” bajo el telón de fondo de las numerosas violaciones perpetradas por Hezbollah, advirtiendo que tienen el “potencial de desatar una violenta escalada”.
Fuente Aurora