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CDMX, México. – Cubadebate publicó el 10 de septiembre las palabras del director del Centro de Investigaciones de Política Internacional del régimen, José Ramón Cabañas Rodríguez, sobre un documento de consenso a aprobar en la inminente reunión del Grupo de los 77 + China a realizarse en La Habana. El documento desresponsabiliza a las élites políticas nacionales sobre los problemas que afronta el país, y centra su atención en las demandas al Norte desarrollado. Esta política de barricadas es la continuidad de la política del dictador Fidel Castro en contra de pagar las deudas internacionales contraídas bajo su mandato.
A pesar de una ayuda de la ex Unión Soviética ocho veces mayor que el Plan Marshall de EE.UU. después de la Segunda Guerra Mundial, esta ayuda recibida por Cuba durante 30 años no se invirtió en el desarrollo; y hoy el país está descapitalizado.
Lejos de propiciar la integración económica Sur-Sur, Cabañas señaló los problemas que afrontan los países del Sur, pero sin ofrecer una salida posible. El lema de la Cumbre (“Retos actuales del desarrollo: el papel de la ciencia, la tecnología y la innovación”), ya sabemos que es el eslogan del presidente designado Miguel Díaz-Canel, quien impone su gobierno al país. En otras palabras, la ciencia, como el desarrollo económico, es imposible desarrollarla en contextos de graves violaciones de derechos humanos y con sistemas políticos despóticos como el cubano. Demasiados recursos y capital humano desviados hacia el control social y la represión.
¿Cuáles son los problemas sobre los que existe un consenso, según Cabañas?
Son estos: las tensiones geopolíticas, las medidas coercitivas unilaterales, las crisis económicas y financieras, la fragilidad de las perspectivas económicas mundiales, el aumento de la presión sobre los alimentos y la energía, el desplazamiento de las personas, la volatilidad de los mercados, la inflación, el ajuste monetario, la creciente carga de la deuda externa, el aumento de la pobreza extrema, el aumento de las desigualdades dentro de los países y entre ellos, los efectos adversos del cambio climático, la pérdida de biodiversidad, la desertificación, las tormentas de arena y polvo y la degradación del medio ambiente, las brechas digitales.
Luego de este rosario de problemas, el funcionario no precisa la responsabilidad de los gobiernos, como si los 134 países que conforman el G77 + China no tuvieran gobiernos ni políticas públicas. Esta invisibilidad de los gobiernos de los países del Sur, así como ignorar sus responsabilidades y las consecuencias de sus políticas internas, es una práctica de la propaganda del dictador Fidel Castro que en su narrativa populista siempre aludió a los pueblos en general e invisibilizó a los gobiernos.
En la segunda parte de su escrito, Cabañas dice abiertamente que no se recogerá en el documento el tema de la invasión de Rusia a Ucrania y sus consecuencias, para salvar así su propia postura gubernamental de apoyo a Rusia.
Sin embargo, el funcionario plantea una superioridad moral de Cuba y de este grupo, algo típico de la izquierda que no tiene propuesta de sociedad viable y que menosprecia y pisotea todos nuestros derechos humanos.
Asimismo, Cabañas valora la postura antioccidental de la política exterior cubana desde 1959 como un logro del país, en ruinas por incompetencia de la dirigencia del régimen. Esa es la propaganda cubana.
¿Aportará algo más que fanfarria la Cumbre del G77 + China en La Habana? El hecho constatable es que 62 años después de creado el grupo, la integración económica Sur-Sur no ha avanzado, y estas cumbres solo han sido, hasta el momento, reclamos al Norte para que subsidie el desarrollo. Al mismo tiempo, han manifestado un rechazo a todos los valores occidentales, incluyendo los derechos humanos, los Estados de derecho, las elecciones libres con alternancia en el poder y la libertad de expresión y de prensa.
Todas las dictaduras que se incluyen en este grupo presentan similares violaciones: Irán, Cuba, Corea del Norte, Venezuela, China, Vietnam, Yemen, Angola, Afganistán, Argelia, Bahrein, Brunei, Burundi, Camboya, Camerún, República Centroafricana, Chad, República Democrática del Congo y República del Congo, Yibutí, Egipto, Guinea Ecuatorial, Eritrea, Etiopía, Gabón, Irak, Laos, Libia, Birmania, Omán, Catar, Arabia Saudí, Somalia, Sudán, Sudán del Sur, Suazilandia, Siria, Tayikistán, Turkmenistán y Uganda.
ARTÍCULO DE OPINIÓN
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Fuente Cubanet.org
