Si Mourinho entrenara al Real Madrid no tendría queja ninguna de esta jornada intersemanal. Un equipo recién ascendido visitó el Santiago Bernabéu con siete rotaciones. Prioridad para el duelo directo contra el Celta, del próximo lunes. Preciado acariciaba un gatito desde el cielo.
También hubo cambios en el equipo blanco. Cinco, exactamente, y notables. Brahim, por primera vez titular. Bellingham también estaba de estreno, pero en su caso de suplente. Mendy, Nacho y Joselu completaron la revolución de Ancelotti. Lo que no tocó fue el sistema. Rombo, otra vez, con Brahim detrás de los delanteros. Excepcional el partido del malagueño, infrautilizado hasta la noche del miércoles.
Los cambios tuvieron un efecto rápido. El Madrid no perdía en el minuto cinco. Milagro, pero incompleto. Arriba, los de Ancelotti, sobre todo Joselu, jugaban a los bolos en lugar de al fútbol. Ocho paradas de Valles, seis de ellas con solo poner duras las manos. Joselu se desesperaba. No tenía dedos en la mano para contar los remates sobre el guardameta amarillo. Tan sencillo como apuntar a alguna de las esquinas de la portería.
Eso hizo Brahim en el tercer minuto de descuento de la primera mitad. Un grave error de Sinkgraven, en un cambio de juego de Camavinga, de izquierda a derecha, se lo zampa con mojo picón el lateral neerlandés. Lucas recibe con una pista de despegue por delante, levanta la cabeza y ve a Brahim solo en el punto de penalti. El 21 recibe, se toma un par de segundos, nadie le encima y apunta a la escuadra. 1-0 para calmar los nervios.
De la Unión Deportiva Las Palmas, más de lo mismo en estas siete jornadas. Fútbol parabrisas, más aburrido que ir a renovar el DNI. Una cosa son las rotaciones y otra pensar que las porterías en el fútbol están de adorno. Tiene mucho trabajo García Pimienta si quiere mantener al equipo canario en Primera.
El gol en la bocina del Madrid alivió la frustración de Ancelotti, que ya no tenía más partes en su cara para tapársela con las manos, pero lo que no evitó el tanto local fue que la tostada cayera del lado de la mantequilla. Lesionado Militao para toda la temporada, posición no reemplazada por decisión deportiva del club, era cuestión de tiempo que cayera otro central. Alaba, con un pinchazo en la parte posterior de su muslo izquierdo, deja al equipo con solo dos defensas sanos, con Montilivi y Nápoles a la vuelta de la esquina.
Joselu, por fin
En el descanso, Joselu recibió un tutorial exprés gratuito de Brahim, y solo tardó siete minutos en ponerlo en práctica. En el 54, incursión de Rodrygo por la izquierda, centro y remate de Joselu al palo derecho de Valles. Fantástico giro de cuello del delantero blanco, que echó toda la rabia fuera a puñetazo limpio contra el césped. 2-0, y partido sentenciado.
Al tercer gol en Liga de Joselu le siguió el regreso de Vinicius, recibido con ovación por la parroquia. También volvió Ceballos. Bueno, en su caso, se estrenó esta temporada, aún virgen por culpa de una lesión en pretemporada. 35 minutos para ambos, buen tono físico, detalles técnicos y ganas de contentar.
Señales positivas de cara al sábado en Gerona. Aquí se juega el Madrid el sábado el liderato del campeonato, ahora mismo en poder de los de Míchel. Solo la mejor versión del Madrid será capaz de meterle mano al equipo revelación del torneo, como la que mostró ayer Brahim, uno más para la causa.
Fuente ABC