Que Fernando Alonso es uno de los mejores pilotos de la historia es un argumento ampliamente reconocido. A sus dos coronas mundiales con Renault hay que sumarle grandes actuaciones frente a coches mucho más potentes que el suyo, como en San Marino 2005 frente al Ferrari de Michael Schumacher o remontadas épicas como la que le llevó en Suzuka a remontar desde la 16ª posición al podio ese mismo año.
Sin embargo, a pesar de todos sus logros, el GP de Brasil, que se disputó este domingo en el circuito de Interlagos en Sao Paulo, le ha dejado un especial buen sabor de boca al asturiano. Su épica batalla con el piloto de Red Bull Sergio ‘Checo’ Pérez por el podio ha llegado en el mejor momento.
A los largo de las últimas semanas, las criticas hacia Aston Martin han arreciado debido al pobre rendimiento ofrecido por el monoplaza, abandonos incluidos. Cuando muchos daban por acabada la temporada para la escudería de Alonso, el asturiano volvió a dar un recital para el disfrute de los aficionados.
Como si David contra Goliath se tratara, Fernando Alonso aguantó las acometidas del piloto mexicano a los mandos del que es, de lejos, el monoplaza más potente de la parrilla. Ni el DRS, ni la velocidad punta pudieron con el buen hacer del asturiano, que jugó todas sus cartas para derrotar al todopoderoso Red Bull.
Máxima tensión en las dos últimas vueltas
Solo hubo un momento en el que parecía que al final se llevaría el ‘Checo’ Pérez el gato al agua. En la penúltima vuelta, el piloto mexicano adelantó al español. Contra cualquier otro piloto, este golpe hubiera sido definitivo. Pero no se trataba de cualquier otro piloto. El que estaba al volante del Aston Martin era nada menos que Fernando Alonso, dispuesto a luchar hasta el último metro.
En la cuarta curva de la última vuelta, Alonso activó el DRS, consiguiendo ponerse por delante del Red Bull de Pérez y librando una lucha sin cuartel hasta la mismísima línea de meta en la que tan solo 53 milésimas decantaron la balanza a favor de ‘David’ Alonso frente a ‘Goliath’ Pérez.
Tras la carrera, ‘Checo’ Pérez demostró su deportividad al felicitar al piloto asturiano cuando era entrevistado, fundiéndose ambos en un abrazo.
Fuente ABC