Dicen que las redes sociales son un espejo de la sociedad, puntualmente de todo lo que opina la ciudadanía sobre puntuales situaciones, políticas, económicas y sociales. Allí se expresan sin filtro permanentes catarsis, cual catarata de valoraciones.
La política no está exenta de aquella pulsión, sobre todo en Twitter, donde los referentes mendocinos saben opinar sobre su propio trabajo y “medir” lo que hace la oposición y/o el gobierno nacional.
Anoche, lo que ocurrió en redes sociales fue sintomático: el cornejismo no opinó sobre los anuncios de Javier Milei, ni a favor, ni en contra, ni nada de nada. No hubo un solo tuit.
Y el silencio, como se sabe, es a veces la opinión más elocuente y brutal. No porque “el que calla, otorgue” —es solo una frase hecha— sino porque el mutismo denota la imposibilidad de defender lo que se anunció. Siquiera una medida. Nada de nada.
Por su parte, el peronismo local decidió “vomitar” su bronca en la otrora red del pajarito, con críticas brutales y anticipando lo que viene: reclamos judiciales, políticos y de los otros.
Este mismo jueves lo dijo el valletano Martín Aveiro, no solo habrá una oportuna reunión con los “gordos” de la CGT —los une el espanto—, sino también una catarata de presentaciones judiciales contra el mamotreto presentado por Milei en forma de DNU.
Lo que viene es inquietante, no solo porque ocurre a 22 años de la defección de Fernando De La Rúa, sino porque de un lado y del otro hay actores que no están dispuestos al diálogo. Y así suelen empezar las guerras… Si es que cabe la comparación.
Fuente Mendoza Today