Desde que el Gobierno de Javier Milei anunció el mega Decreto de Necesidad y Urgencia los sectores sindicales y las organizaciones sociales y piqueteras se pusieron en estado de alerta y movilización en todo el país.
La provincia no fue la excepción y fue en ese sentido que desde la Asociación de Trabajadores del Estado de Mendoza lanzaron un comunicado en la que se declaró “el estado de asamblea y movilización permanente en todos los sectores laborales que nucleamos”.
En un escrito, en el que también se hizo parte a la Central de Trabajadores de Argentina (CTA) autónoma Mendoza, se sostiene que el DNU deroga “leyes esenciales, que tardaron años en conquistarse, gracias a la lucha organizada de los pueblos y de los trabajadores en su conjunto”.
“Dichas leyes permitieron que la clase trabajadora de nuestra provincia y país pudiera salir adelante, con la integración de diferentes normativas y Convenios Colectivos de Trabajo (CCT), que regulan las fuentes laborales, las negociaciones colectivas de salarios y condiciones de trabajo, la cobertura de necesidades sanitarias y un sistema previsional”, añade el paper.
En la misma línea, ATE Mendoza asegura que el decreto amenaza de forma directa “a los sistemas solidarios de un Estado garante de derechos que supimos construir a lo largo de nuestra historia argentina, en cuanto a cuestiones esenciales que son pioneras en toda Latinoamérica”.
También sostiene que la normativa anunciada por Milei “introduce un recorte al derecho a huelga y a la estabilidad laboral de todo trabajador. Aspectos que están contemplados por la Constitución Nacional, la ley de asociaciones sindicales y los tratados internacionales”.
“Con más unidad y fuerza, vamos a tener que salir a las calles a defender nuestra Constitución Nacional, adoptando las medidas de acción directa que nuestra asociación sindical y central obrera llevarán adelante”, finaliza.
El comunicado completo
El Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) impuesto por el presidente de la Nación electo, Javier Milei, lleva consigo la derogación de leyes esenciales, que tardaron años en conquistarse, gracias a la lucha organizada de los pueblos y de los trabajadores en su conjunto.
Dichas leyes permitieron que la clase trabajadora de nuestra provincia y país pudiera salir adelante, con la integración de diferentes normativas y Convenios Colectivos de Trabajo (CCT), que regulan las fuentes laborales, las negociaciones colectivas de salarios y condiciones de trabajo, la cobertura de necesidades sanitarias y un sistema previsional.
No obstante, el mega DNU anunciado por el principal mandatario nacional amenaza con destruir más de 300 leyes, desregulando todo a su paso: economía, salud, educación, jubilaciones y asistencia social, entre otros miles de aspectos relevantes.
Esto amenaza directamente a los sistemas solidarios de un Estado garante de derechos que supimos construir a lo largo de nuestra historia argentina, en cuanto a cuestiones esenciales que son pioneras en toda Latinoamérica.
Vale aclarar que, además de desregular la economía y desguazar el Estado, el DNU introduce un recorte al derecho a huelga y a la estabilidad laboral de todo trabajador. Aspectos que están contemplados por la Constitución Nacional, la ley de asociaciones sindicales y los tratados internacionales.
Al imponer un DNU en forma autoritaria y directa, que va en contra de las distintas leyes, que tanto le costó a nuestro país conseguir en los distintos rubros, Javier Milei incurre en la violación concreta de la capacidad e independencia de los demás poderes que componen al Estado: Judicial y Legislativo.
El DNU se entromete con las distintas mutuales, obras sociales y prepagas, propiciando también una libertad de precios que los ciudadanos tenemos que pagar para poder cubrir los costos de la canasta básica alimentaria.
Sin dudas, vamos a seguir teniendo salarios de miseria. La escalada inflacionaria no se detiene y promete ascender cada vez más, exterminando el poder adquisitivo de la clase trabajadora y condenándola a subsistir, mientras los diferentes grupos de empresarios, amigos del poder, serán beneficiados con la reducción de impuestos y la derogación de leyes que evitaban la precarización laboral.
Dejaran de existir los programas de estadísticas, el control de precios y la promoción industrial. El nefasto protocolo anti piquetes que promueve la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, profundizará la criminalización de la protesta, que ya supimos padecer y combatir.
Todas las empresas del Estado pasarán a ser sociedades anónimas, para luego ser privatizarlas al mejor postor. Con ello, quieren echar y extinguir todo el empleo estatal.
Como si esto no bastara, el DNU atenta contra los recursos de energía renovable, promueve la mega minería contaminante a cielo abierto y la venta de recursos estatales a capitales extranjeros.
Por todo esto, consideramos que este mega DNU es un concreto avasallamiento a los derechos de los trabajadores y del pueblo argentino en general.
Desde ATE y CTA Autónoma Mendoza declaramos el estado de asamblea y movilización permanente en todos los sectores laborales que nucleamos, en repudio de estas terribles políticas que impone el Gobierno Nacional.
Con más unidad y fuerza, vamos a tener que salir a las calles a defender nuestra Constitución Nacional, adoptando las medidas de acción directa que nuestra asociación sindical y central obrera llevarán adelante.
Fuente Mendoza Today