
La trama podría parecer menor, trivial, incluso poco gravitante. Porque refiere a la actividad de unas canchas de paddle ubicadas en calle Pedro del Castillo 3050 de Guaymallén.
Pero hay un trasfondo allí inquietante, donde aparecen los nombres de los funcionarios de siempre, los mismos que vienen siendo expuestos por Diario Mendoza Today por sus desaguisados.
Entre otros, Cintia Brucki y Javier Masó. Incluso, aparece “de coté” Lucas Valsecchi, el ex director de Cultura del Municipio.
Porque uno de los implicados es Emiliano Valsecchi, y nada parece casual ante la coincidencia del apellido. ¿Son familiares? Puntuales fuentes juran que sí.
La trama arranca y se desarrolla a través del Expediente 16398/21, a través del cual pueden comprobarse diversas irregularidades cometidas por el lugar en cuestión —Arena Padel Mendoza— a la hora de funcionar. De hecho, hasta el día de hoy el lugar no está habilitado.
Pero primero lo primero: el puntuapié inicial de lo que va a contarse en esta nota se dio a fines de diciembre de 2021, cuando vecinos circundantes del lugar en cuestión decidieron quejarse en la municipalidad de Guaymallén por los ruidos molestos. Partidos que se jugaban a toda hora, sin respetar la siesta ni la madrugada. Ni nada.
Ello derivó en una inspección del lugar que comprobó, no solo que esto era cierto y real —hay dos peritajes de sonido que lo comprobaron—, sino que se descubrió que el lugar estaba plagado de irregularidades, que llegan a la afrenta de avanzar en construcciones clandestinas. Basta ver el expediente en cuestión, al pie de la presente nota.
Lo curioso es que, a pesar de lo dicho, el lugar sigue funcionando como si nada, lo cual deja en evidencia a los funcionarios guaymallinos.
Hubo, hay que decirlo, puntuales mediaciones. Pero no se llegó a nada. Básicamente porque el tal Valsecchi y sus socios no cumplieron nada de lo acordado.
“Le pedimos que respete el horario de la noche, le dijimos ‘no termines a las 2 de la mañana’”, dijo uno de los vecinos en diálogo con Mendoza Today. Alguien que vive hace 23 años en el mismo lugar.
Y añadió: “Fuimos a la mediación, cada vecino fue citado por separado, en 2022. Quedamos de acuerdo que iban a respetar los horarios, que iban a pasar las fechas de los torneos, pero no cumplieron”.
No es lo único que los complica: según pudo saber este diario, los mismos involucrados en esta trama tienen otra denuncia en la Sexta Sección de Ciudad. En otra cancha de paddle ubicada en calle Paso de los Andes.
Como puede verse, la impunidad es total. A pesar de todo lo dicho y documentado los tipos siguen ahí. Acaso porque la propia municipalidad de Guaymallén supo auspiciar los torneos de paddle. Más aún: hay quienes dicen que camiones de la municipalidad regaban el lugar.
Nada que deba sorprender: Guaymallén es así. La tierra de la corrupción y la anomia.
Fuente Mendoza Today