
En las semanas anteriores al estallido de la guerra de Gaza, salió a la luz que el Líbano e Israel habían comenzado a mantener conversaciones indirectas para delimitar sus fronteras terrestres.
El líder del grupo terrorista Hezbollaj, Hassan Nasralah, consideró que existe una «oportunidad» para que el Líbano «recupere territorios disputados» en futuras negociaciones, que condicionó al previo fin de la guerra de Gaza.
«Estamos ante una oportunidad histórica para la liberación total de cada pulgada de nuestra tierra libanesa, y ante una verdadera oportunidad para fijar una nueva ecuación que impida al enemigo israelí violar nuestros cielos, aguas y la soberanía de nuestro país«, sentenció en un discurso televisado por canales afines.
«Esa oportunidad la abrió este frente y es una de las bendiciones del apoyo a Gaza, pero ninguna conversación sobre este tema, ningún diálogo o negociación existirán ni tendrán ningún resultado sin la detención de la agresión contra Gaza», agregó el líder terrorista y clérigo chií.
En las semanas anteriores al estallido de la guerra de Gaza, el pasado 7 de octubre, salió a la luz que el Líbano e Israel habían comenzado a mantener conversaciones indirectas para delimitar sus fronteras terrestres, donde hay varios puntos disputados entre ambos.
Las dos naciones están separadas actualmente por la denominada Línea Azul, una suerte de frontera de facto temporal establecida por la ONU en 2000.
El estallido del reciente conflicto en el enclave palestino desató también un intenso intercambio de fuego entre Hezbollah e Israel en las áreas fronterizas entre ambos países, paralizando el supuesto diálogo y desatando los miedos a una nueva guerra entre las partes.
Pocos días antes del inicio de la guerra entre Israel y el movimiento islamista palestino Hamás, el secretario general de Hezbollah había afirmado que la delineación de fronteras era «responsabilidad del Estado» y había prometido cooperación al respecto.
Con información de agencias.
Fuente Aurora