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Desde este mediodía Javier Milei pondrá sobre la mesa mucho más que un simple encuentro con gobernadores en la convocatoria que hizo a las provincias en la Casa Rosada: el Presidente medirá el alcance de su poder de cara al llamado Pacto de Mayo, testeará el nivel de apoyo político que podría lograr en adelante para sacar la ley ómnibus del Congreso y la estrategia de alianzas podría ser crucial para sentar las bases de su plan económico.
El jefe de Estado emitió una directiva concreta a todo su gabinete: “Vamos a negociar para un cambio pero no para que todo quede igual”, les dijo a sus allegados. El mensaje lo retransmitió ayer el jefe de ministros, Nicolás Posse, en la reunión de gabinete. Anoche en el Gobierno festejaban la confirmación al encuentro de los 24 distritos.
Sin embargo, todo indica que Milei no estará hoy a las 15 para la reunión con gobernadores en la Casa Rosada. Algunos deslizan que sólo pasaría a saludar. Pero lo cierto es que la convocatoria con mandatarios provinciales estará liderada por Posse; el ministro del Interior, Guillermo Francos, y Karina Milei. El ministro de Economía, Luis Caputo, está en la cumbre del BID y no llegará a tiempo.
En este contexto, la estrategia del Gobierno es empezar a darle forma y sentar las bases de un consenso para la firma del Pacto de Mayo que Milei redactó con diez puntos básicos de su gobierno para suscribir por los gobernadores el 25 de mayo en Córdoba. Pero el Gobierno se jugará las siguientes cartas encuentro de hoy en la reunión con los gobernadores:
Apoyo en el Congreso
La apuesta de máxima de Milei es conseguir el apoyo de la mayor cantidad de gobernadores posibles para avanzar en el Congreso con la aprobación de todo el texto de la ley ómnibus. Esto es, los 644 artículos, de los cuales 300 habían sido rechazados por los aliados al gobierno en el debate de Diputados antes de que la iniciativa sea retirada del recinto.
Como plan para sumar adhesiones a ese polémico proyecto el Gobierno propondrá a las provincias la restitución del impuesto a las Ganancias coparticipable para compensar el recorte de fondos nacionales a los gobernadores. Francos dijo ayer que se elevará el piso de ese tributo y al mismo tiempo podría aplicarlo retroactivamente. Es decir, que se pagaría desde septiembre pasado en que Sergio Massa decidió eliminarlo.
En la Casa Rosada aseguraron a El Cronista que no hay intención alguna de poner en la mesa de negociación con los gobernadores el impuesto PAIS o Bienes Personales. “No hay nada de eso”, dijo tajante un funcionario.
También está en juego la posibilidad de incluir un proyecto de ley reforma laboral o avalar el capítulo del DNU que prevé esa modificación en el sistema del trabajo.
Sólo bajo la seguridad de contar con un aval a la ley ómnibus Milei ofrecerá a los gobernadores el acuerdo de coparticipar Ganancias. Es una apuesta muy arriesgada pero en la Casa Rosada aseguran que no hay otra alternativa. “Se negocia para el cambio y la ley ómnibus es el cambio“, replican.
La liga de gobernadores
En la convocatoria de hoy en la Casa Rosada el presidente Milei también pone en juego el armado de un bloque de gobernadores que podrían ser leales y aquellos enfrentados a sus políticas.
Anoche el Gobierno festejaba la confirmación a la reunión de los 24 mandatarios provinciales convocados. aunque algunos de ellos enviarían a sus vices. De todas formas, la ausencia de algunos díscolos no es un problema para el Gobierno. ¿Qué pasaría con los rebeldes como Kicillof, Quintela o Zilliotto? preguntó El Cronista a un ministro. La respuesta fue inmediata: “No nos preocupan los rebeldes porque nunca los vamos a convencer”, dijo.
No obstante, el gobierno podría sumar adhesiones para la foto en la Casa Rosada aunque ello no implicará un cheque en blanco de los gobernadores. De hecho, ayer hubo un cónclave de los mandatarios patagónicos liderados por Ignacio Torres (Chubut), Claudio Vidal (Santa Cruz) y Rodolfo Figueroa (Neuquén), entre otros. El mensaje de estos rebeldes del Sur fue claro: advirtieron sobre la falta de diálogo del Gobierno y condicionaron su respaldo a un eventual pacto fiscal.
El alerta de los sureños no es menor si se tiene en cuenta que varios de ellos están en el PRO o eran hasta hace poco aliados de Milei. Ni siquiera Mauricio Macri logró domar la rebeldía del chubutense que sigue enojado con la Nación por el recorte de fondos. La ecuación es un riesgo para un Presidente que necesita amplio respaldo del interior para sacar las leyes estructurales de lo que llama “la refundación nacional” de la Argentina.
“Halcones” versus “Palomas”
La estrategia de convocatoria a los gobernadores pondrá en juego también la lógica interna de la administración Milei que hoy se divide entre “Halcones” y “Palomas”.
El Presidente se considera un “halcón” aunque prefiere el mote de “León”. Así y todo, en el juego interno del gobierno optó por escuchar a los dialoguistas. De hecho, se entusiasmó con el anuncio del Pacto de Mayo hacia el final del mensaje ante el Congreso.
En este contexto, los ministros Francos, Posse e incluso el asesor estrella Santiago Caputo están en la nómina de las “palomas”. Estos creen que se debe negociar con los gobernadores para alcanzar luego un acuerdo parlamentario que garantice de una vez la aprobación de la ley ómnibus o el mega DNU.
La apuesta de esta convocatoria a los gobernadores dejará expuesto a este sector de la Casa Rosada si hay un fracaso, frente a aquellos “halcones” como Luis Caputo, Sandra Pettovello o Patricia Bullrich. Estos no son proclives a la negociación con aquellos que creen que forman parte de “la vieja política”.
En medio de todos estos dilemas y las apuestas a fondo que hoy se pondrán en tela de juicio, Milei se juega buena parte de su capital político y la continuidad de su plan económico.
Fuente El Cronista
