Los Mossos d’Esquadra investigan un posible nuevo caso de violencia vicaria en Cataluña, tras localizar los cadáveres de una mujer, de 43 años, y sus dos hijos gemelos, de 8, en un domicilio de El Prat de Llobregat (Barcelona). El padre de los niños, se suicidó en la estación de tren de localidad, horas antes de que la Policía localizase los cuerpos.
Fue un conductor de Rodalies quien alertó de que una persona se había lanzado a las vías del tren, pasadas las cuatro de la tarde de este martes, 9 de abril. Horas después, los investigadores localizaron los cadáveres de su pareja y sus hijos, un niño y una niña, en su domicilio. Según apuntan fuentes policiales, el individuo, de 42 años, había dejado una nota pidiendo perdón. La División de Investigación Criminal (DIC) de la Región Policial Metropolitana Sur se ha hecho cargo del caso, y ha decretado el secreto de las actuaciones.
Según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC), no constan antecedentes judiciales entre la pareja. Ha sido el Juzgado de Instrucción 4 de El Prat, en funciones de guardia, el encargado del levantamiento de los cadáveres. Ahora se ha inhibido a favor de Instrucción 5, encargado de las causas de violencia sobre la mujer.
Cabe recordar que la semana pasada, en Bellcaire (Gerona), un individuo mató a su hijo, de cinco años, y dejo malherida a su mujer, de 29 años. Los Mossos detuvieron horas después del suceso al progenitor, que ahora se encuentra en prisión provisional, por el asesinato y la tentativa. Fue la madre quien consiguió salir de la vivienda, durante el ataque, para pedir ayuda a una vecina. En el momento del suceso, no existía ninguna causa judicial en curso entre la pareja, pero en julio de 2022, una tercera persona si formalizó una denuncia ante la Policía, lo que derivó en una investigación por daños. La mujer se negó a declarar, y el caso finalmente se archivó.
Con este nuevo crimen, son ya cinco los menores asesinados en Cataluña en 2024. Además del pequeño de Bellcaire, en enero, un padre mató a sus dos hijos, de 7 y 10 años, en un piso del barrio de Horta (Barcelona). Fue la madre quién alertó a la Policía, después de que el progenitor no le devolviese a los niños tras las vacaciones navideñas, y de que éstos tampoco acudiesen al colegio. La pareja estaba separada.
Fue la mujer quien, junto a una agente de los Mossos, se presentó en el domicilio. Al llamo por teléfono al individuo, y no contestar, fueron los bomberos quienes accedieron a la vivienda, los bajos, a través de una ventana. Lo primero que notaron fue un fuerte olor a gas. En su interior localizaron los cuerpos del hombre y de los pequeños. En este caso, tampoco había ningún procedimiento ni denuncia previa por violencia entre la mujer y el padre de sus hijos, que se habían separado tiempo atrás.
Fuente ABC