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¿Sabías que existe una manera científica de revertir los efectos del envejecimiento en los músculos? Un reciente descubrimiento científico podría tener la respuesta en una proteína.
Investigadores de la Universidad de Stanford en Estados Unidos han identificado una proteína que desafía los límites del envejecimiento muscular. Además, promete el fortalecimiento de nuestros músculos a través de ciertos tratamientos.
Con este descubrimiento, aumentar la masa muscular sería una realidad accesible para muchos. Seguí leyendo y enterate de qué proteína se trata y qué dice la ciencia sobre este método.
¿Cómo evitar la atrofia muscular por el envejecimiento de manera efectiva?
El estudio llevado a cabo por los científicos de la Universidad de Stanford reveló un método innovador para combatir la atrofia muscular asociada al envejecimiento, según lo publicado en la revista Science Translational Medicine.
Según Alimente+, Melissa L. Norton, editora del estudio publicado en la revista mencionada, resaltó cómo la acumulación de la proteína 15-PGDH en las miofibras desnervadas actúa como un marcador de daño nervioso crónico.
La inhibición de esta enzima parece inducir la prostaglandina E2, crucial para:
- Restaurar la conectividad neuromuscular: esencial para la recuperación de la funcionalidad muscular tras un daño.
- Promover la recuperación de fuerza: vital para enfrentar los desafíos del envejecimiento o tras una lesión o enfermedad prolongada.
“Nuestros datos sugieren que la inhibición de la 15-PGDH puede constituir una para estimular fisiológicamente la prostaglandina E2, y promover la después de una denervación aguda o crónica debido a una lesión, enfermedad o envejecimiento”, menciona la científica.
Avances científicos contra el envejecimiento: aumenta la masa muscular gracias a la proteína 15-PGDH
Los científicos de Stanford han logrado entender cómo la molécula 15-PGDH puede actuar como un agente rejuvenecedor para los músculos envejecidos o dañados.
La clave radica en su capacidad para modificar el proceso natural de descomposición de la prostaglandina E2 (PGE2), un componente crucial del mecanismo de curación del cuerpo que se debilita con la edad y las enfermedades.
Al bloquear 15-PGDH, se facilita la restauración de las uniones neuromusculares que tienden a deteriorarse a medida que las personas envejecen, lo que resulta en una reducción notable de la atrofia y la pérdida de fuerza muscular.
Aproximadamente el 30% de las personas mayores de 80 años sufren de fragilidad muscular. Al impedir la acción de la 15-PGDH, se podrían revertir algunos de estos efectos, mejorando la calidad de vida y la independencia en la vejez.
Helen Blau, directora del Laboratorio Baxter de Biología de Células Madre en Stanford y coautora del estudio, expresó entusiasmo por el futuro de esta investigación.
“Nuestros próximos pasos serán examinar si el bloqueo de la función de 15-PGDH en personas con afecciones como la atrofia muscular espinal, en combinación con terapia génica u otros tratamientos, puede aumentar la fuerza muscular perdida”, mencionó Blau.
Según la directora, los próximos pasos incluyen el examen de la efectividad del bloqueo de la función de 15-PGDH en humanos con distintas afecciones musculares pero, para la sorpresa de varios, también se investigará su impacto en pacientes con ELA.
¿En qué consistió el estudio para aumentar la masa muscular?
Según el sitio Alimente+, a través de un experimento minucioso, los investigadores han demostrado cómo una intervención específica puede tener resultados prometedores en el rejuvenecimiento muscular:
- Modelo de estudio: utilizaron ratones de 24 meses, equivalentes a una edad avanzada en humanos. Previo al tratamiento, los investigadores simularon lesiones en los nervios ciáticos para estudiar la reparación y regeneración muscular.
- Mecanismo de acción: la investigación se centró en la inyección de una molécula que bloquea la enzima 15-prostaglandina deshidrogenasa (15-PGDH). Esta enzima se incrementa con la edad y promueve la atrofia muscular, lo cual es un fenómeno común en el envejecimiento.
- Resultados: al bloquear esta enzima, se logró restaurar la fuerza muscular y aumentar la masa muscular de los ratones. Los investigadores observaron una reparación significativa en las conexiones de nervios y fibras musculares.
Fuente El Cronista