La ministra de Asentamientos y Proyectos Nacionales de Israel, la ultraderechista Orit Strook, aseveró este miércoles, en una entrevista con la radio del Ejército (Galei Tzahal), que el acuerdo que se está discutiendo para lograr una tregua en la Franja de Gaza, «significa tirar todo a la basura» porque da la espalda a los principales objetivos militares.
«Un gobierno que envía gente al combate, que convoca a miles de soldados y reservistas que lo dejaron todo para luchar por los objetivos que el Gobierno se propuso y luego les dice: ‘ No importa, lo tiraremos todo a la basura’, no tiene derecho de existir», criticó Strook.
La ministra, conocida por sus declaraciones polémicas, tildó de «imprudente, horrible y terrible» la propuesta de tregua mediada en El Cairo y que busca, como ya ocurrió el pasado mes de noviembre, un intercambio para rescatar a rehenes israelíes cautivos en Gaza a cambio de terroristas palestinos presos.
Para Strook volver a firmar un pacto con el grupo terrorista islámico palestino supondría acabar «abandonando a la mayoría de los rehenes», porque solo permitiría liberar como mucho a unos 20 o 30 de ellos, de los 133 que quedan.
Según los detalles filtrados, la última propuesta de tregua incluiría el canje de 33 rehenes vivos por un número indeterminado de terroristas palestinos presos, además del retorno de los gazatíes desplazados al norte.
Con estas declaraciones, Strook se une a las voces de los otros socios de ultraderecha del Gobierno, el ministro de Finanzas, Bezalel Smotrich, y el de Seguridad Nacional, Itamar Ben Gvir, que han dejado claro que abandonarán el Ejecutivo si se alcanza una tregua con Hamás y no se lleva cabo una incursión militar en la estratégica ciudad de Rafah para destruir a los cuatro batallones que le quedan a Hamás.
Uno de los principales desafíos es que Rafah alberga actualmente a alrededor de 1,4 millones de gazatíes, en su mayoría desplazados de las zonas de combate.
La llegada de un acuerdo de tregua es, de hecho, la principal demanda de los israelíes que tienen a sus seres queridos secuestrados por Hamás. Llevan meses manifestándose y pidiéndole al Gobierno de Israel que priorice este pacto.
De momento, Israel sigue esperando la respuesta del grupo terrorista palestino a la última contraoferta que le lanzó este pasado fin de semana en la que el Gobierno de Netanyahu habría accedido a conceder muchas de sus principales exigencias.
El secretario de Estados de Estados Unidos, Antony Blinken, quien llegó anoche a Israel, dijo este miércoles a un grupo de manifestantes israelíes apostados frente a su hotel en Tel Aviv que la propuesta israelí presentada a Hamás es «muy inteligente» y que el grupo terrorista palestino «debe decir que sí».
Con colaboración de agencias
Fuente Aurora