La Policía busca a los autores del tiroteo que la noche del pasado martes intentaron acabar con la vida de Alejandro Parra Mateo, de 42 años, cuando regresaba a su casa, en Puente de Vallecas. La hipótesis principal es que se trata de un ajuste de cuentas. No en vano, el herido ingresó en prisión tras ser arrestado el 19 de junio de 2012 acusado, con un compinche, de atracar bancos con pelucas, bigotes y trajes.
Anteriormente a ello, la Policía le relacionó con Carlos Jarry Sánchez López, un conocido alunicero de la época que murió asesinado cuando apenas tenía 23 años, en enero de 2018.
Conocido en el mundo del boxeo, donde también tiene un nombre importante, como Álex Parra, posee a su nombre una empresa de repartos en la actualidad. De hecho, el martes por la noche, a eso de las diez, regresaba de trabajar y acababa de aparcar su furgoneta de Seur cerca de su casa. A la altura del número 17 de la calle del Río Uruguay, varios pistoleros se acercaron a él. Algunas fuentes apuntan a que podrían ir en una moto.
Le descerrajaron tres disparos, a relativamente cerca distancia, según reflejaron los testimonios de los vecinos y los casquillos del calibre 9 milímetros corto hallados luego por el Grupo de Delitos Violentos (DEVI) de la Brigada Provincial de Policía Científica. También acudieron agentes del Grupo VI de Homicidios, que han tomado las riendas de la investigación.
«No vais a contar nada a la Policía»
Fueron los vecinos los que llamaron al 091, alertados por los ‘petardazos’ y tras ver «a un hombre de unos 40 años tirado en el suelo», tal como expresaron en su comunicación. Llegaron rápidamente funcionarios del Grupo de Atención al Ciudadano de la comisaría de Puente de Vallecas. Se hicieron esfuerzos para que la situación de nervios no llegara a más, pues algunos familiares de Alejandro bajaron a la calle para ver lo que le había ocurrido.
Al acercase los policías, el agredido tuvo todavía los arrestos de decir a sus vecinos: «Si yo no les he contado nada, menos vais a decir vosotros», de manera retadora. Fue trasladado consciente y estable al hospital Gregorio Marañón por el Samur. Presentaba una herida por arma de fuego en el muslo izquierdo, con rotura del hueso, con único orificio de salida (se había quedado dentro el proyectil).
El tiroteo tuvo lugar muy cerca de la calle del Lago Maracaibo, donde asesinaron el 9 de enero de este año a Natalia Silva, la tía del también alunicero Francisco Maya Silva, conocido como ‘el Gordo Maya’ y que se encuentra en prisión desde octubre pasado.
Ahora, además de intentar arrancar alguna pista a Parra, los agentes analizarán las cámaras de seguridad de la zona y posibles amenazas previas.
Fuente ABC