Por primera vez en sus 40 años de historia, Dolce&Gabbana, la reconocida marca de ultralujo, abrirá un local en la Argentina. En un momento del mercado local donde muchas etiquetas premium decidieron dejar el país, la empresa italiana decidió apostar por el consumo de la punta de la pirámide.
De paso por la Argentina, Alfonso Dolce, CEO de la firma creada por Domenico Dolce y Stefano Gabbana en 1984 y hermano de uno de los fundadores, habló en exclusiva con El Cronista y puso fecha para el arribo de la firma a Buenos Aires. “Nuestro objetivo es abrir la primera tienda en la primavera de 2025“, aseguró el empresario en su breve visita.
El primer local de la marca que le hizo una línea exclusiva de pijamas a la familia Messi luego del Mundial será una “gran sorpresa”, aseguró su número uno, quien adelantó que una vez abierta la tienda de indumentaria -el negocio de Moda y core de la empresa- estarán bajo análisis nuevos puntos de venta, incluso para entrar con otras categorías como joyería u otros negocios como perfumería y cosmética.
Si bien Dolce no quiso adelantar la ubicación de la tienda aseguró que están analizando locales a la calle, entre ellas, por supuesto, la coqueta Avenida Alvear y dentro de shoppings -las marcas exclusivas por lo general eligen el Patio Bullrich-, aunque aún no hay nada cerrado. “Puede ser una y después otra”, adelantó el empresario que también tiene planes para Perú y Uruguay.
El anuncio podría marca el inicio de la vuelta del lujo al mercado local luego de la última década en los que reconocidas etiquetas mundiales como Louis Vuitton, Carolina Herrera, Cartier o Fendi dejaron el país.
La inversión en la Argentina es parte de la estrategia de Dolce&Gabbana a nivel mundial y tiene dos ejes: abrir nuevos mercado y reposicionar el negocio en los que ya está. Para ello, hace dos años creó Home, una nueva división de muebles y accesorios que, además, ofrecer el servicio de decoración integral de casas y hoteles. Por otro lado, en 2023 la empresa asumió el control del negocio de perfumería y cosmética que se desarrolla tanto en las tiendas de indumentaria como de manera exclusiva.
“Este año tenemos previsto abrir entre 10 y 15 locales nuevos“, contó el empresario. Entre ellos, nueve tiendas en Arabia Saudita, en Bahréin y en Australia. Y una nueva tienda en New York de 2000 metros cuadrados en la esquina de la Avenida Madison que antes ocupaba Hermes.
Esta es una forma de crecer en facturación -explicó Dolce- justamente en tiempos donde, ya sea por el Covid o la guerra, los compradores chinos y rusos -grandes clientes de las marcas de lujo- ya no viajan ni gastan tanto. “El lujo vive cambios importantes relacionado con los cambios geopolíticos que se están dando en el mundo”, detalló.
La firma llegará al país de forma directa, modelo que utiliza en todo el mundo con una inversión que aún no pueden detallar ya que no tienen aún la locación pero que implica, en promedio, unos euros 7000 u euros 8000 por metro cuadrado, “no menos de euros 5000 y hasta euros 12.000”. “Estar en cada país directamente es la única forma de asegurarnos que los clientes tengan la experiencia completa“, explicó Dolce. “Las franquicias compran con una mirada comercial, tienen un presupuesto limitado y eligen que ofrecer con un criterio comercial. Nosotros priorizamos la experiencia completa de marca”, sumó.
Por otro lado, el empresario aseguró que llegar de forma directa significa una inversión del grupo a largo plazo. “Una marca como Dolce&Gabbana no puede correr el riesgo de abrir y cerrar. Este tipo de inversión busca generar lealtad con los clientes”.
Por qué llegar ahora
A la hora de explicar por qué la decisión de desembarcar en el país, Alfonso Dolce explicó: “Hay que estar preparados para venir a un mercado como la Argentina, que es grande en extensión territorial, pero chico a nivel de negocio. Ahora que conocemos mejor al consumidor latinoamericano y ya construimos lealtad con la marca pensamos que era el momento correcto para llegar a mercados como la Argentina, Perú y Uruguay. Antes no estábamos preparados culturalmente para comprender el mercado local”.
El empresario recalcó que para elegir un destino este tiene que tener dos condiciones: ser una ciudad turística y destino de negocios. Son condiciones que encontraron, por ejemplo, en las 13 ciudades en las que está presente en Brasil, entre ellas San Pablo, Rio de Janeiro, Recife; en Santiago de Chile, país en el que están hace 10 años; Bogotá, Panamá, Aruba o Santo Domingo. En México, la marca tiene 27 boutiques.
“Sí notábamos es que el argentino compraba en otros países de la región o en Europa o en los Estados Unidos y aún el mercado no estaba totalmente abierto, como cultura del cliente, para recibir una marca como Dolce&Gabbana. Ahora sí”, recalcó.
Además, el número uno de la marca ve de manera positiva el hecho de que en la Argentina no estén, en este momento, otras etiquetas de lujo. “Channel no está, Gucci, Louis Vouitton no están. Venir primeros es una señal de fidelidad hacia el mercado“, dijo.
En cuanto al mercado argentino desde el punto de vista económico y fiscal, Dolce explicó que “por supuesto que lo analizamos y sabemos que toda inversión lleva riesgos. A veces van bien y a veces no tan bien”. A la vez el empresario señaló que es mejor invertir en un país abierto al mundo, especialmente teniendo en cuenta que marcas como Dolce&Gabbana que produce todas sus prendas, a mano, en Italia. Y eso es parte de su ADN.
“D&G es una marca que ya tiene 40 años y estamos en 75 países, siempre en forma directa, y tenemos la experiencia para entender los mercado. Ahora, hay hechos como la guerra o la pandemia que no podemos controlar. No somos magos”, dijo risueño Dolce.
El viaje de Dolce a la Argentina es de definiciones. El estudio de mercado, su evolución y la situación actual lo realizó previamente Alberto Candellero, presidente de DG Américas y Sudáfrica, una persona que conoce los mercado de la región y el local también.
Fuente El Cronista