El Régimen de Regularización de Activos no estuvo exento de cambios en su redacción durante las negociaciones en el Senado. Donde las provincias y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) se adelantaron y dejaron sentadas condiciones de la reglamentación que impulsen obras públicas.
En el documento que el flamante jefe de Gabinete, Guillermo Francos, les entregó a los líderes de los partidos previo al plenario de comisiones de esta tarde, hay modificaciones en la letra chica del blanqueo con el que se buscan ingresos por 0,5% del Producto Bruto Interno (PBI) junto con la moratoria y Bienes Personales.
A pesar de que se esperaban cambios en las fechas de las etapas frente a la demora en el tratamiento que ya arrastra más de cinco meses intermitentes y la presión que podría generar al intercambio de información automático con los Estados Unidos (FATCA) de septiembre, no se generaron.
Los cambios en el articulado vinieron del lado de los movimientos que se permitirían hacer con el dinero en efectivo, en Argentina o en el exterior, que sea depositado o transferido a la “Cuenta Especial de Regularización de Activos”.
“Los fondos (…) podrán ser invertidos exclusivamente en los instrumentos financieros que indique la reglamentación, la que deberá contemplar (…) los que emitan las Provincias y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires para integrar la financiación de obras públicas. Los resultados de estas inversiones deberán ser depositados en la misma Cuenta Especial de Regularización de Activos”, destacaron en el artículo 32.
Así, en caso de aprobarse, aquellos contribuyentes que blanqueen dinero en efectivo y no quieran pagar el “Impuesto Especial de Regularización” por retirarlo, pero tampoco dejarlos inmovilizado en la cuenta, tendrán la posibilidad de invertirlo en instrumentos que emitan las provincias o la CABA.
Este cambio en la redacción que lograron los senadores y los gobernadores le marca la cancha a la administradora federal, Florencia Misrahi sobre las opciones que deberá tener en consideración a la hora de reglamentar el blanqueo.
Lo que responde al viejo pedido que arrastran los mandatarios subnacionales de Juntos por el Cambio (JxC). Desde la primera reunión que tuvieron, el pasado abril, en Casa Rosada ante el entonces jefe de Gabinete, Nicolás Posse y el ministro del Interno, Guillermo Francos, reclamaban por cambios en Ganancias y la reactivación de la obra pública.
Frente a la política, que formó parte de las promesas de campaña del presidente Javier Milei del fin de la obra pública para que “no se robe más”. La cual tuvo su contracara con la caída de la actividad del sector de la construcción.
El último Estimador de la Actividad Económica (EMAE), que publicó el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), reveló una baja en términos interanuales en marzo del 8,4%, donde el rubro de la “Construcción” sufrió la mayor merma con – 29,9%.
Fuente El Cronista