
La escritora argentina Magalí Etchebarne pasó ayer por Valladolid para presentar su segundo libro de cuentos ‘La vida por delante’, que le ha valido el prestigioso Premio Ribera de Duero de Narrativa Breve, organizado por la D. O. junto a la editorial Páginas de Espuma. El desamor, la vejez, pero sobre todo la muerte trenzan los cuatro relatos que componen la muerte, un hilo conductor que no se propuso al principio , pero que «fue apareciendo», reconoce la escritora, quizá debido a que «los últimos cinco años de mi vida estuvieron teñidos por la muerte, la enfermedad y hubo un poco de oscuridad alrededor mío».
Así que los diferentes estados emocionales por los que pasó fue «impregnando la escritura» y los textos porque aunque los cuatro relatos son inventados «creo que en todos hay algo autobiográfico»: «Ese corazón caliente de la verdad es lo que uso para empezar a construir. No le tengo miedo a la página en blanco porque siempre la vida te da la primera línea. Partir de algo que conozco, que vi, que escuché, que me contaron, que experimenté… Me sirve para construir la ficción», explica horas antes de presentar su obra en la librería ‘El rincón de Morla’ en Valladolid, su primera parada en un periplo que esta misma semana le llevará a Sevilla, Zaragoza y que concluirá en la Feria del Libro de Madrid. «Da vértigo todo esto que me está pasando. Es muy soñado pero no se parece a mi vida real», sostiene la escritora sobre la gira para presentar su libro premiado.
Destacaba Mariana Enríquez, presidenta del jurado, en el fallo del galardón que «Magalí Etchebarne es una de las autoras más auténticas que he leído (…) Encuentra humor en la tragedia y sabe de la tristeza con rabia y ternura».
La escritora ve el humor como un recurso para tomar «distancia con el texto«, pero también »es una forma de venganza contra un tema«. »Hay relatos que mientras los escribía me parecían muy densos y pensaba que introduciendo algunas escenas un poco tragicómicas eso se suavizaba«, justifica sobre una ‘herramienta’ que utilizó »no porque pensara que el lector no lo iba a soportar, sino porque yo me aburría y entonces al introducirlo me sacaba a mí de esos lugares oscuros«.
Magalí trabaja como editora, una profesión que le «encanta» porque le permite hacer lo que más le gusta: leer. Le ayuda también a escribir «pero no creo que pudiera ser la editora de mis propios cuentos. Es necesario que venga otro y te oriente».
El libro arranca con un primer cuento que se va abriendo a una red de mujeres que se resiste a la sordidez del paso del tiempo. Cree la autora que «no es lo mismo ser vieja que ser viejo». «Creo que nos torturamos y el mundo nos tortura especialmente más a nosotras» y que «es completamente distinta nuestra relación con el propio cuerpo, que desarrollamos desde muy temprana edad y sobre todo, aprendemos que esos cambios se tienen que registrar con espanto, con absoluta vergüenza, y eso hay que frenarlo».
‘La vida por delante’ es el tercer libro de Magalí Etchebarne tras iniciarse con un volumen de cuentos (‘Los mejores días’) y otro de poemas (‘Cómo cocinar un lobo’). Explica la autora que «hay algo en la potencia del relato breve que a mí me encanta. Como la amargura de saber que algo termina demasiado rápido y se te queda en la cabeza la idea de querer volver a leerlo».
El hecho de que en esta ocasión fueran cinco autoras las finalistas para el Premio Ribera del Duero de Narrativa Breve no corresponde a una «operación de marketing» ni a un «boom» de las mujeres escritoras. «Para mí lo que sí está pasando es una revolución lectora. No le puedes decir a una chica de 20 años que lo único que tiene que leer son obra escritas por hombres». «Siempre ha habido mujeres que han escrito bien. Los editores miraban menos para ellas porque no vendían».
Han pasado seis meses ya desde que Javier Milei accedió a la Presidencia de Argentina y Magalí se muestra aún «sorprendida» como «alguna gran parte de la población» de que ganase: «No lo vimos venir, pero luego pensándolo te das de que también había un gran hartazgo. Le votó un gran porcentaje. Eso no tiene cuestionamiento». Sobre los últimos enfrentamientos ocurridos entre el presidente de su país y el Gobierno español considera que «él quería que pasara todo esto, pero entiendo que al de aquí también le convenía. Es muy complejo todo».
Fuente ABC