AREQUIPA, Perú – El HMCS Margaret Brooke, buque patrullero de la Armada de Canadá, atracó en la mañana de este viernes 14 de junio en la bahía de La Habana, informó la agencia Reuters. En el lugar también se encuentra la flotilla militar de Rusia que arribó el miércoles último.
La llegada del navío canadiense había sido anunciada por la Marina de Guerra Revolucionaria de Cuba y ocurre apenas horas después de que Estados Unidos anunciara el arribo a la bahía de Guantánamo de un submarino de ataque rápido.
El HMCS Margaret Brooke pertenece a una nueva serie recientemente introducida en la Marina Real Canadiense, y su visita a la Isla, prevista hasta el próximo 17 de junio, se enmarca en el 80 aniversario del inicio de las relaciones diplomáticas entre ambos países, informó un comunicado de la Marina cubana.
El buque de Canadá da continuidad a las visitas recibidas en 2016 y 2018, por las fragatas HMCS FREDERICTON y HMCS CHARLOTTETOWN, respectivamente.
Por su parte, el Comando Sur de EE.UU. señaló que la estadía de USS Helena en territorio guantanamero forma parte de una visita portuaria de rutina mientras transita por su área geográfica de responsabilidad. Asimismo, señala que el submarino lleva a cabo “su misión global de seguridad marítima y defensa nacional”.
El primero en llegar al Puerto de La Habana durante la mañana de este miércoles fue el submarino de propulsión nuclear, tal y como había anunciado el Ministerio de las Fuerzas Armadas (MINFAR) del régimen cubano.
Durante la trayectoria hacia Cuba, la flotilla rusa practicó el uso de armas de alta precisión en el océano Atlántico, informó el medio estatal ruso TASS, citado por la cadena CNN.
Según el informe, la tripulación de la fragata y del submarino nuclear practicaron el uso de armas de alta precisión mediante simulación por computadora contra objetivos navales ubicados supuestamente a una distancia de más de 600 kilómetros.
La flotilla rusa en la capital cubana está compuesta por la fragata Gorshkov, el submarino de propulsión nuclear Kazan, el buque petrolero de la flota Pashin y el remolcador de salvamento Nikolai Chike
Por su parte, el Departamento de Defensa de Estados Unidos aseguró que la llegada a Cuba de la flota de buques de guerra rusos, incluyendo un submarino de propulsión nuclear, no supone una amenaza para la seguridad nacional estadounidense.
En contraste, el laboratorio de ideas Cuba Siglo 21 alertó que, según fuentes propias, el régimen de La Habana había solicitado a Vladímir Putin la presencia militar nuclear rusa en la Isla durante este verano.
La acción, advirtió el laboratorio de ideas, persigue enviar al pueblo de la Isla el mensaje de que Estados Unidos no se atreverá a venir en su ayuda “si se derrama sangre cubana en las calles de ciudades y pueblos”.
Además, la Asamblea de la Resistencia Cubana (ARC) denunció este jueves la injerencia del Kremlin en Cuba mediante un comunicado, resaltando la presencia militar de la Rusia imperial en la Isla.
“La llegada de una flotilla de barcos de guerra y un submarino nuclear ruso a La Habana, con una posible escala en Venezuela, constituye un contundente respaldo imperial a la dictadura comunista de Cuba”, señala la nota.
La ARC desaprobó la intromisión rusa en los asuntos internos de Cuba como un intento de salvar “la desprestigiada dictadura castrista” y volver a usar su territorio nacional como plataforma militar para amenazar o agredir a Estados Unidos.
Fuente Cubanet.org