Por Martín Olveira Guiñazú
Es posible acaso que luego del grave artificio verbal al que hemos asistido durante la campaña entre el Presidente Milei y el desocupado Horacio Rodríguez Larreta, uno se siga enterando a diario del nombramiento en lugares neurálgicos de personajes que responden directamente a quien sería el socio mayoritario de Pizza Cero y ex jefe de Gobierno porteño?
Sí, es posible. Porque en esta tragicomedia nacional parece que el guion está escrito por los mismos que nos venden pizzas a precio de oro. Esta vez, el nuevo episodio involucra al flamante Jefe de Gabinete de la Ministra Pettovello, Lucas Fernández Aparicio. Un hombre que, por si no fuera suficiente su lealtad a UPCN y a Larreta, tiene como pareja a Paula Uhalde, ex gabinete de HRL. Sí, así tal cúal lo leen.
Los movimientos en el gobierno se vuelven cada vez más inexplicables y más, digámoslo sin tapujos, ridículos. ¿Tan difícil es investigar y saber fehacientemente quién es aquel que pondrán en aquellos lugares de donde luego se filtra información sensible que pone en complicaciones al gobierno?
Uno a estas alturas se pregunta: ¿SON O SE HACEN?
Porque no hay otra explicación lógica para semejante cadena de despropósitos. ¿O será que el mérito para ocupar un cargo en este gobierno es precisamente no haber aportado nada en favor de que Milei llegase a ser Presidente?
La lógica parece haber abandonado las oficinas de la Casa Rosada, dejándonos con la sensación de que estamos viendo una película de enredos, pero sin el final feliz a la vista. Mientras tanto, los ciudadanos seguimos observando atónitos cómo se juegan nuestras fichas en este tablero donde la coherencia brilla por su ausencia y el sarcasmo es nuestra única defensa.
¿Hasta cuándo seguirán estos despropósitos? ¿Hasta cuándo se seguirán filtrando personajes dudosos en puestos claves? Capítulo aparte para los nuevos nombrados en la A.F.I…
Alea Iacta Est.