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Cada 21 de junio, con la llegada del invierno, los pueblos originarios reconocen y honran el orden cósmico y las leyes de la naturaleza a través de diferentes rituales ancestrales.
La llegada del invierno marca un momento sagrado en el calendario de comunidades como los mapuches, que celebran el Wiñoy Xipantv, o el año nuevo mapuche, y los quechuas, quienes reciben al Inti Raymi para dar gracias al sol por el ciclo que termina y pedirle fuerzas para el que comienza.
¿Cuáles son los rituales ancestrales que realizan los pueblos originarios por la llegada del invierno?
Los pueblos originarios, como los mapuches, celebran el regreso del sol con rituales como el Wiñoy Xipantu o el Machaq Mara. En el norte del país y en el Cusco, el Inti Raymi marca la fiesta del Sol, un evento sagrado y cíclico que celebra el renacer del tiempo y la reconexión consigo mismo.
Durante esta ceremonia, el Willka Nina, o fuego sagrado, es protegido toda la noche mientras la comunidad baila, juega y canta para fortalecer sus lazos. Luego, reciben el amanecer con los brazos extendidos hacia el sol.
Además, celebran el We Tripantu, conocido como la “nueva salida del Sol y la Luna”, marcando el inicio del año nuevo y la noche más larga del año, el 21 de junio.
Ritual para renovar la energía durante la llegada del invierno
En el Solsticio de invierno, se lleva a cabo un ritual especial para renovar energías y marcar nuevos comienzos .
- Prepará un altar con una vela blanca, una taza de té con limón y una cinta amarilla.
- En una hoja blanca, escribí todos los proyectos que deseás iniciar y concretar. Detallá los pasos necesarios y la ayuda que puedas requerir para llevarlos a cabo. Una vez completada la lista, doblá el papel y sostenelo con ambas manos.
Este sencillo ritual te ayudará a conectar con tu propósito y renovar tus energías en el Solsticio de invierno. (Foto: Freepik) - Concentrá tus pensamientos en la realización de tus metas y sentí cómo les transferís energía a través de tus manos.
- Encendé la vela y cerrá los ojos. Visualizate rodeado por un aura blanca, proyectando energía positiva hacia tus proyectos. Concentrá tus pensamientos en la realización de tus metas y sentí cómo les transferís energía a través de tus manos.
- Después de unos minutos, agradecé sinceramente. Cuando la vela se apague, tirá el té en una maceta o en la tierra como símbolo de ofrenda a la naturaleza.
- Guardá el papel doblado y, si es posible, leelo todos los días para mantener la energía enfocada en tus objetivos hasta que se materialicen.
Este sencillo ritual te ayudará a conectar con tu propósito y renovar tus energías en el Solsticio de invierno.
Fuente El Cronista
