El tipo de cambio informal trepó $25 y cerró a $1430, por lo que marcó un nuevo máximo histórico. Las acciones de las empresas argentinas en Wall Street rebotaron. En el Gobierno intentan relativizar el impacto y aseguraron que “no van a devaluar”.
Cerca de las 18, los bonos argentinos en dólares que operan en Wall Street mostraron una caída de alrededor del 2%; mientras que las acciones de empresas argentinas (ADRs) tuvieron un rebote que se acerca el 2% en el caso de algunos títulos.
Los papeles que registran este martes un rebote fueron los de los bancos. En concreto, el Banco Macro encabezó con una suba diaria del 3,6%. En el sector bancario, lo seguían el Banco BBVA (2,3%), Banco Supervielle (2,3%) y el Grupo Financiero Galicia(1,6%). También mostraron una leve suba las acciones de YPF (2,7%), Edenor (2,2%) y Mercado Libre (0,9%).
Por otro lado, el dólar blue volvió a escalar y se vendió a $1430, lo que significa que en las dos primeras jornadas de la semana subió $65. Mientras tanto, el CCL operó a $1428,72 y el MEP se negoció a $1428,46. En tanto, el dólar cripto cotizó esta tarde a $1428,40 para la venta.
En los despachos oficiales intentaron restarle importancia a la situación. “La reacción de los mercados es la típica volatilidad que se produce frente a un escenario de excesivas ganancias de estos meses, sumado a un nuevo programa monetario/fiscal que pocas veces se ha visto en la Argentina”, argumentaron. E insistieron: “Hasta que los agentes se adecuen al nuevo escenario puede haber volatilidad. No es un problema”.
“El mercado sigue enfocado en las dificultades de cara a la normalización cambiaria”, evaluó Pedro Siaba Serrate, jefe de Research y Estrategia de PPI en diálogo conTN. Y aclaró: “Los anuncios del viernes fueron interesantes (sobre todo en relación al incremento de tasa efectiva que eventualmente ocurra tras la ejecución de las novedades), pero no contenían un mensaje de tinte cambiario, lo cual no atiende la ansiedad del mercado frente a este tema. Paradójicamente, el equipo económico no puede dar ni certezas ni demasiados pistas en relación a la salida del cepo porque eso afectaría el sistema de incentivos y complicaría aun mas la situación”.
Pero eso no es todo. Más allá de la falta de precisiones sobre cuándo se levantarán las restricciones cambiarias, también hay preocupación por otras cuestiones. En primer lugar, por lo que pueda pasar con la acumulación de reservas del Banco Central, que en junio cerró su primer mes con saldo negativo desde el inicio de la gestión de Javier Milei. “El mercado no está viendo con buenos ojos que el Banco Central vaya a perder US$2000 millones en los próximos meses”, sentenció Javier Casabal, Estratega de Renta Fija de Adcap.
Fuente TN