– El PP y Vox acaban de romper su alianza en las comunidades autónomas. El PP andaluz gobierno con Vox en ocho ayuntamientos, ¿se ha planteado romper estos acuerdos?- Bueno, no hablamos de grandes municipios. Los acuerdos se mantendrán si hay respeto a los acuerdos y las líneas rojas que tenemos como formación política. Si Vox no respeta esas líneas rojas, sería difícil mantener los acuerdos. Creo que sería un error que Vox actuara por interés electoral y no por interés institucional, creo que han hecho un flaco favor a la sociedad rompiendo los acuerdos en las comunidades autónomas por una cuestión baladí.- ¿Vetó usted un pacto con Vox en el Ayuntamiento de Sevilla?- Tengo una comunicación fluida con el alcalde de Sevilla, José Luis Sanz, pero es él quien toma las decisiones en el ámbito de la ciudad. Me informa, pero él decide las estrategias. Decidió que no podía llegar a un acuerdo con Vox por la propia actitud de Vox, que según me contó era muy agresiva. A partir de ahí, Vox ha unido sus votos a los del PSOE y Podemos y tumban de manera sistemática iniciativas que son muy importantes para Sevilla. Es paradigmático que PSOE y Vox voten juntos en contra del PP, creo que los votantes de Vox en Sevilla lo tendrán en cuenta en el futuro.-En el último pleno del Parlamento se mostró muy contundente contra el discurso sobre la inmigración de Vox.-En España hay un problema, y es que Sánchez ha abdicado de su responsabilidad en politica inmigratoria. O es capaz de poner los intrumentos Frontex para frenar la llegada de decenas de miles de inmigrantes ni de renovar los convenios con países de origen para que no salgan de allí. No eleva la voz en Europa para que se adopte una política común. Nosotros somos partidarios de una inmigración ordenada y panificada. ¿Necesitamos inmigrantes en Andalucía? Sí, porque hay un envejecimiento de la población y hay sectores en los que los españoles y los andaluces no quieren trabajar ya. Pero necesitamos orden para poder formarlos y que haya un modelo de inclusión. Solidaridad, toda, pero de forma regulada, no con el descontrol que mantiene el Gobierno de Sánchez. Y el Gobierno nos tiene que dar recursos para formar y cualificar a esos migrantes, porque de lo contrario tendremos una inmigración fracasada. El Gobierno utiliza la inmigración políticamente, pero no le importa nada. Y no voy a participar nunca en la estrategia que persigue Vox, que es juzgar a las personas en función de su raza.
Fuente ABC