ADN del crimen: al ritmo de los motochorros, aumenta el delito en un conurbano que suma homicidios a diario
Por Gustavo Carabajal
Las denuncias crecieron 4 por ciento este año con relación a los datos oficiales sobre lo ocurrido en la provincia de Buenos Aires durante 2023
Ricardo Rivero Haedo circulaba por el kilómetro 42 del ramal Pilar de la Panamericana, de regreso a su casa, cuando dos delincuentes en una moto verde salieron de atrás de uno de los cientos de vehículos que estaban parados por el embotellamiento en la autopista y le dispararon un balazo a quemarropa en el pecho para robarle su Yamaha MT. El proyectil pegó en el cierre de la campera e impactó en la pelvis. El conductor de una Berlingo lo subió a la camioneta y junto con la ayuda de un motociclista que abrió paso a los bocinazos en medio del estacionamiento a cielo abierto en el que se había convertido la Panamericana a las 18 del 18 de marzo pasado, lo llevó al hospital Austral, donde le salvaron la vida.
Los asesinatos notificados en septiembre
Desde ese día, Rivero Haedo fue sometido a cinco intervenciones quirúrgicas. El ataque que sufrió este licenciado en administración de empresas fue uno de los casi 540.000 delitos que se denunciaron durante el primer semestre de este año en territorio bonaerense.
Dicha cifra constituye un aumento de 4% con respecto a la cantidad de hechos delictivos denunciados en los primeros seis meses de 2023. De esos 540.000 expedientes iniciados en la Justicia bonaerense, al menos 15% está integrado por amenazas y delitos culposos. El resto corresponde a ataques contra la propiedad, narcomenudeo, la integridad sexual y contra las personas.
Ante la solicitud de una entrevista sobre la sucesión de episodios de violencia ocurridos en lo que va de 2024, los colaboradores del ministro de Seguridad bonaerense, no respondieron.
“Me atacaron en el mismo lugar que el 29 de octubre de 2022, asesinaron a Andrés Blaquier, para robarle la moto. En mi caso, advertí que me seguían. Al llegar al peaje, pasaron con la moto sin patente y con la barrera baja. Nadie los detuvo. Creí que los había perdido. Pero me equivoqué. Habían intentado robarme cinco veces en un año. Siempre pude escapar a pesar de que me dispararon. Pero en esta oportunidad me sorprendieron. Los delincuentes volvieron. Uno de ellos se tiró encima de la moto e intentó sacarme la llave mientras estaba en movimiento. Me puse en posición para entregar la moto y me dispararon a veinte centímetros”, relató el licenciado en administración de empresas.
Igual que el sargento de la Gendarmería Víctor Formichelli, baleado hace una semana en Hurlingham o el oficial principal de la Policía de la Ciudad, José Luis Gómez, asesinado en Lanús, Rivero Haedo fue blanco de los delincuentes que le dispararon para robarle la moto.
Tanto los robos de motos como los de automóviles constituyen dos de los delitos que más crecieron en los últimos años. Según las estadísticas de la Superintendencia de Seguros de la Nación, por año se roban 42.333 motos en la Argentina.
Al menos 25.760 de esas motos se robaron en la provincia de Buenos Aires. Las compañías de seguros agruparon los distritos del conurbano en zonas para realizar la distribución geográfica de los casos. De acuerdo con esa división, el área suroeste, integrada por los partidos de Lanús, Lomas de Zamora y La Matanza, es la zona caliente de los robos de motos 5138 hechos denunciados en un año. En Lanús, mataron al policía Gómez para robarle la moto cuando llegaba a su casa.
Mientras que en la denominada área noroeste, formada por los partidos de San Martín, José C. Paz, Malvinas Argentinas, San Miguel y Tres de Febrero hubo 4510 robos de motos.
En esa zona ocurrió uno de los episodios más violentos de los últimos días donde un grupo de delincuentes persiguió durante dos kilómetros a través del Camino del Buen Ayre a un repartidor para robarle la moto.
“Estoy vivo, de milagro. Quedé tirado en el asfalto. Me salía sangre del pecho. Me llevaron al hospital Austral y me salvaron la vida. Pasé dos semanas en terapia intensiva. Cuando me recuperé decidí comenzar una lucha para reclamar que el Gobierno aplique políticas de seguridad con el objetivo de que se puedan evitar más ataques como el que sufrí. En la cuenta de change.org logré juntar 23.000 firmas para solicitar un proyecto de ley que castigue con penas más duras los delitos de robos con armas de fuego”, agregó Rivero Haedo.
Esas 25.760 motos que se robaron en territorio bonaerense formaban parte de un universo de 64.038 vehículos sustraídos en la provincia de Buenos Aires durante 2023. De esos 64.038 vehículos, al menos 38.278 corresponden a denuncias por robos de automóviles, camionetas, taxis y remises.
La violencia aplicada por los delincuentes también quedó expuesta en los robos de automóviles.
En los últimos días, dos asaltantes, que todavía no fueron apresados, mataron de un balazo en pecho a Alberto Quiroz Ayala, porque se resistió a que le robaran su Fiat Siena cuando llegaba a la casa de su novia, en Cosquín y Pasaje Escobar, en Ingeniero Budge, partido de Lomas de Zamora.
Uma Aguilar, de 9 años, en Lomas de Zamora; María Lucrecia Arias, de 50, en Castelar; Eugenio Sipatov, de 40, en Lanús, Leonardo Quinteros, de 50, en Merlo, Sebastián Ochoa, de 26, en José C. Paz y Maximiliano Rojas, de 27, en Lanús fueron asesinados durante los primeros días de este año cuando los asaltantes quisieron robar los automóviles y motos en los que se movilizaban.
Uma fue asesinada el 22 enero pasado a las 8.45, cuando viajaba en el asiento trasero del Ford Ka gris de su padre, Eduardo Aguilera, quien se desempeña en la custodia del Ministerio de Seguridad de la Nación. En ese momento, el vehículo fue interceptado por un grupo de cuatro delincuentes que al llegar a Pío Baroja 637, de Villa Centenario, partido de Lomas de Zamora, descendieron de un Toyota Corolla negro y, a punta de pistola exigieron que entregara el automóvil.
Mientras María Eugenia, la madre de Uma, cerraba el portón de reja del garaje, Eduardo intentó eludir a los asaltantes para evitar que se llevaran el Ford Ka con su hija a bordo. Pero uno de los ladrones disparó dos balazos e hirió en la cabeza a la niña, que falleció tres horas después en el hospital Churruca.
La pequeña, de 9 años, fue una de las víctimas de los 125 homicidios en la jurisdicción comprendida por los partidos de Ezeiza, Almirante Brown, Esteban Echeverría y Lomas de Zamora, en el primer semestre de este año.
Mayor riesgo en la zona sur
Además, en ese distrito judicial creció casi 6% la cantidad de delitos denunciados con respecto al año pasado. En los primeros seis meses de este año hubo casi 67.000 hechos delictivos, cinco mil casos más que en el mismo período de 2023.
Por ejemplo, durante la primera mitad de 2023, se iniciaron casi 10.000 causas penales por robos, mientras que en el mismo período de este año hubo 12.000 robos denunciados.
Según cifras oficiales también creció la cantidad de robos de vehículos a mano armada, una modalidad delictiva a la que se dedicaban los malvivientes que atacaron a Quiroz Ayala y a su pareja. En el primer semestre del año pasado se registraron 1700 robos de automóviles a mano armada en el distrito judicial Lomas de Zamora, mientras en los primeros seis meses de este año hubo 300 hechos más.
La violencia también creció entre los menores acusados de delitos. Durante los primeros seis meses de 2023, los adolescentes de entre 16 y 17 años cometieron nueve homicidios, en la mencionada jurisdicción del sur del conurbano. Pero, en el primer semestre de 2024 fueron procesados por haber concretado 17 asesinatos. Además, los magistrados dictaron casi 160 declaraciones de inimputabilidad a menores de 16 años.
Lo preocupante del caso fue que dicha cifra puso al descubierto un notable crecimiento de menores no punibles involucrados en delitos graves con respecto al año anterior, cuando hubo cien declaraciones de inimputabilidad, en seis meses.
Uno de los cuatro detenidos por el homicidio de Uma tiene 17 años y sus cómplices son mayores. El Peugeot 307 gris en el que se movilizaban los asaltantes tenía una calcomanía en la luneta con la inscripción: “Capacidad máxima, cuatro bandidos”. La leyenda estaba pegada en la parte izquierda de la luneta del vehículo hallado en una estación de servicio.
A Cintia Daniela Rojas, de 44 años, la mataron para robarle el auto. La mujer fue degollada cuando iba al volante de un Volkswagen Up rojo utilizado como remís de una aplicación de viajes. El hecho ocurrió en Hernandarias y Estados Unidos, Lanús.
Daniela Fernanda Luna, de 37 años, quien se desempeñaba como sargento en el Comando de Patrullas Sur de La Matanza, fue asesinada cuando un asaltante que se hizo pasar como pasajero intentó robarle el Ford Fiesta que la mujer usaba para realizar viajes para una aplicación. La víctima tuvo que recurrir a ese trabajo extra porque no le alcanzaba el sueldo como policía.
Fuente La Nación