Federico Tomasevich, presidente de Puente, la firma financiera de más de 100 años de operaciones en el país, que se dedica a la gestión patrimonial, banca privada y trading institucional.
El financista aprovecha la ventana de un calificado foro que organizó Puente junto con The Economist sobre “el futuro de los negocios en el Cono Sur” para retomar contacto con la prensa, después de varios años de haber estado concentrado en el crecimiento de la estructura de la compañía.
Hoy por hoy, Puente se mueve con tres ejes: la de la región, con operaciones muy activas en la Argentina, Paraguay y Uruguay, el mercado de los EE.UU., con las oficinas en Miami, y la cabecera europea, con las oficinas en Madrid, España.
Es líder en la organización y colocación de títulos en el mercado de capitales, en particular de las provincias.
“La lógica indica que hay que sacar el cepo, pero también que sea cuando las consecuencias de sacarlo no hagan daño a la economía; lo van a levantar cuando se sientan cómodos para hacerlo”.
“En la región están pasando muchísimas cosas. El tema es que no se le da la visibilidad, nosotros debemos darle la importancia que se merece. Y nosotros tenemos una visión bastante optimista por los niveles de tensión geopolítica en ese nivel global escalando en todos los frentes. Latinoamérica está muy aislada de esos posibles contagios. También pesa la asa de interés americana bajando.
-¿Cuánto influye cada factor?
-Es una combinación de varios. La Argentina abordando la agenda de evacuación de la producción de Vaca Muerta seriamente necesita inversiones grandes, que está sucediendo. El riesgo país cayendo consistentemente desde hace seis meses, la macroeconomía normalizándose, los precios relativos normalizándose. El celo del Gobierno en el frente fiscal, que eso es bueno siempre. Y las compañías empezando a tener acceso al mercado internacional de deuda, que hace cinco años no lograban, a tasas súper competitivas, que no veían hace muchos años. Y las provincias también. Hoy si Neuquén saliese a emitir un bono, se te tira de cabeza la mitad del planeta, con garantía de hidrocarburos.
-¿Cuánto impactará la baja de tasa de interés en EE.UU. y cuánto el factor de la necesidad de las economías reales en las inversiones en la región?
-La plata de la región es la que está. Si se invierte, es un montón. Lo bueno es que la baja de la tasa americana no va a generar una competencia en toda la región. En el mundo, de 2008 a la fecha hay seis veces más dólares emitidos, cuatro veces más euros emitidos, yenes más de cuatro veces, el Reino Unido… el tema es adónde va esa liquidez…. a las criptomonedas… Hay un montón de plata a nivel global. Eso no quiere decir que no haya problemas. Con que la plata de la región se invierta en la región alcanza. Cuando vas a México, ¿quiénes son los principales que están invirtiendo? Los mexicanos. Vas a Brasil, a Chile, a Paraguay, salvo salvo algún caso excepcional, una mega inversión donde hay un estratégico, pero en el día a día son los de cada país. En la Argentina, los argentinos. Julio y agosto fueron meses récord de ventas en el Real Estate para los últimos ocho años. ¿Quiénes vinieron? Los argentinos. Pero buscan un contexto favorable para que la rueda empiece a girar y la gente empiece a gastar.
El holding tiene sede en Reino Unido y opera con tres núcleos: la región de Argentina, Paraguay y Uruguay; Europa, con cabecera en Madrid, España; y los Estados Unidos, con base en Miami.
-¿Es más importante entonces el blanqueo que el RIGI?
-Todo tiene su cuota de importancia y todo tiene su cuota de coherencia en esa importancia. Normalizar precios relativos, ordenar la mejor economía, abordar su frente fiscal, preocuparse por la política monetaria, y entonces empieza a caer el riesgo país. Tratar de simplificar la vida de los argentinos y de las empresas sacando trámites estériles que era un entorpecimiento de la vida cotidiana de todos y encarecían no se sabe cuánto la producción y la vida de los argentinos. Es una combinación de cosas, y en la medida que estos pasos secuenciales sigan esta tendencia lo que vimos los últimos seis meses, me imagino se proyectará en los próximos seis, en la medida que en el mundo no haya un evento increíble, pues en este contexto global, hay que prestarle atención a qué pasa en el mundo.
-Mencionó la necesidad de que baje el riesgo país, ¿qué se hace para bajarlo?
-El Gobierno está trabajando con la agenda que habrán trazado, priorizando temas. Y a la fecha las consecuencias son que bajaron la inflación drásticamente, que dejaron de perder reservas de una manera exacerbada y que no está la brecha y el riesgo país de vuelta va a terminar perforando los mil puntos. Para mí el riesgo país refleja un riesgo que no es real. Técnicamente es la TIR de los bonos soberanos, pero los bonos corporativos salen a tasas que no salían hace cinco años, o los de las provincias, que no son un poquito arriba o un poquito abajo, son mucha diferencia. Entonces yo creo que esa diferencia es producto de la estructura de los bonos y no del riesgo percibido del país, porque si no un bono del Neuquén no rendiría 7% u 8%, rendiría 12, 13, 14%.
-Y el cepo, ¿cuánto influye en decisiones de inversión?
-Yo creo que lo van a levantar cuando se sientan cómodos para levantarlo. ¿Se puede convivir con el cepo? ¿Cuántos años ya hubo cepo? Se puso, se sacó, se puso, se sacó. Pero si mañana se saca el cepo, no quiere decir que todo vaya mejor. Entonces, la lógica dice que sí, que hay que sacarlo, pero también que sea cuando las consecuencias de sacarlo no hagan daño a la economía. Por eso, nosotros le prestamos mucha más atención a las tendencias que a la foto. Leer la tendencia es fundamental, porque eso genera la expectativa. La foto no te genera expectativa, la tendencia sí genera expectativa. Y la expectativa es importantísima para los actores de la economía del día a día.
“En la Argentina invierten los argentinos. Julio y agosto fueron meses récord de ventas en el Real Estate para los últimos ocho años. ¿Quiénes vinieron? Los argentinos. Pero buscan un contexto favorable para que la rueda empiece a girar y la gente empiece a gastar”.
-¿Qué pasa con el resto de los activos, además de los bonos?
-Si se ven los indicadores de préstamos contra PBI, comparativamente a Latinoamérica, están bajísimos. Pero mejor que hace seis meses. Ahora hay para crecer un montón, un montón en la expansión de crédito. Hace seis años en las provincias lo único que vienen haciendo es cancelando deuda. Las provincias en términos de deuda son más solventes. Sí creo que vamos a entrar en una fase distinta si las cosas siguen como vienen.
-¿Qué va a pasar con la industria financiera?
-Es un fenómeno global la desglobalización muy importante en todo el mundo vos vas a Francia y al banco más grande es Francia. Vas a Alemania y el banco más grande es Alemán. Vas a Italia y el banco más grande es italiano. Vas a Brasil y el banco más grande es brasileño. Vas a Paraguay y los dos bancos más grandes o de los tres más grandes, dos son paraguayos. En la Argentina, no debería ser distinto y vos tenés en esta desglobalización los empresarios locales tomando más relevancia en cada uno de sus países y en cada una de sus regiones. En Europa no tenés grandes grupos, tenés grandes grupos europeos. En Brasil tenés grandes grupos, por supuesto tenés grupos internacionales, pero los más grandes, más relevancia son locales. Y este es un fenómeno que empezó, yo creo que el punto donde aceleró la desglobalización fue el 2008 con la quiebra de Lehman Brothers y los bancos globales, ING, HSBC, y esto empezó a acelerarse y cuando ves hoy el mapa mundial de la desglobalización al menos en industria bancaria, banca de inversión, gestores de fondos es muy notable tres bancos más grandes de Brasil son los tres de Brasil y eso está pasando en todos los países y debería y eso va a seguir consolidándose.
Fuente El Cronista