La lluvia caía con fuerza en el centro de Madrid, pero con mayor intensidad diluviaban reproches en el hemiciclo del Congreso. Como se presagiaba, la corrupción que cerca al Gobierno y al PSOE ha protagonizado la sesión de control al Ejecutivo, donde el líder de la oposición, el popular Alberto Núñez Feijóo, ha cargado con dureza contra Pedro Sánchez , al que implicados en el caso Koldo se referían, según el último informe de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, como «el número uno».
El presidente del PP ha pedido al jefe del Ejecutivo que dimita, pero este, con aparente tranquilidad, le ha contestado que aún quedan «mil días de legislatura» a pesar de que, más allá de la corrupción, en el epicentro de la sesión de control, el Gobierno ni siquiera ha sido capaz hasta ahora de aprobar unos presupuestos y encadena varias derrotas parlamentarias por la inestabilidad e incompatibilidad entre sí de sus socios de investidura.
A nadie le ha sorprendido, con el exministro José Luis Ábalos al borde de la imputación, que Núñez Feijóo haya exigido nuevamente explicaciones al presidente del Gobierno por la trama de cobro de mordidas millonarias por la venta de mascarillas durante la pandemia del Covid-19. No las ha habido. «¿Cuántas veces, dónde y sobre qué hablaron usted o su mujer con el señor Víctor de Aldama, actualmente en prisión?», ha preguntado inicialmente el líder popular por el ingreso en la cárcel del comisionista del caso Koldo por el fraude de 182 millones de euros de IVA en hidrocarburos, con quien la esposa de Sánchez, Begoña Gómez —investigada a su vez por posible tráfico de influencias—, se reunió antes y después del rescate millonario a Air Europa junto al CEO de Globalia, matriz de la aerolínea, Javier Hidalgo.
El Gobierno ha pasado de elogiar a Ábalos por «evitar un conflicto diplomático» a decir que se canceló la visita
«Este Gobierno ha actuado con contundencia, ha colaborado con la Justicia, a diferencia de lo que hacían ustedes, que creaban policías patrióticas, y, finalmente, gobierna», ha replicado Sánchez a Núñez Feijóo de primeras, antes de pasar, como han hecho después el resto de sus ministros, al clásico y tú más. Ante la ausencia de explicaciones, se airean las vergüenzas del adversario. El líder del PP, cargado de ironía, se ha preguntado si colaborar con la Justicia es ponerle dos querellas al juez que lo investiga, en alusión a los intentos de presionar a Juan Carlos Peinado , que indaga sobre las presuntas irregularidades que rodean a la esposa del presidente.«Llegó como adalid contra la corrupción y ha acabado con nombre en clave en la trama, el uno. Se lo digo tranquilamente, señor uno, las instituciones del Estado no pueden estar al servicio de su defensa personal. Márchese», ha dicho el diputado popular, tras remarcar que el presidente, como él mismo reconoció la semana pasada, sabía de la visita a España de la vicepresidenta de Venezuela, Delcy Rodríguez —que tiene prohibido pisar suelo europeo— , días antes de que se produjese, al contrario de lo que se había mantenido hasta ahora, y «aforó» a Ábalos cuando, según él, ya lo «sabía».
Después, la vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, le ha recordado al popular Elías Bendodo que las listas del 23-J se hicieron antes de trascender la implicación del exasesor de Ábalos Koldo García en el caso que lleva su nombre.Sánchez, que se ha marchado a la carrera después de responder a las tres preguntas de la sesión de control, no ha ofrecido ninguna explicación sobre los contactos con De Aldama y apenas ha acertado a pedir perdón por el caso Koldo en su respuesta a la secretaria general de Podemos, Ione Belarra, líder del único socio del Gobierno que se ha mostrado crítico con el PSOE por este asunto. «Usted que repartía carnés de decencia hace diez años, ahora reparte amnistías, excarcelaciones y mordidas», le ha atizado Núñez Feijóo, a lo que él ha contestado: «Tápese un poco, de la A de Ayuso a la Z de Zaplana, tienen un caso de corrupción para cada letra del abecedario».«Gürtel, Púnica, Lezo, Kitchen…»Eduardo Zaplana , exministro con el PP y condenado este martes a diez años de cárcel por el cobro de mordidas por la concesión de las ITV valencianas, ha servido de argumento contra los populares al Gobierno, como el resto de sus casos de corrupción. «Gürtel, Púnica, Lezo, Kitchen…», han enumerado repetitivamente Montero, Félix Bolaños, Fernando Grande-Marlaska, Pilar Alegría y Ana Redondo, en sus respuestas a diputados populares. «Por mucho que intenten taparlo, todo lleva al número uno, aunque salga corriendo», le ha espetado la número dos de Núñez Feijóo, Cuca Gamarra, a Montero.«Ya sabemos por qué el señor Sánchez se ha ido por piernas, por qué tenía tanta prisa.
El fiscal general del Estado , su fiscal general del Estado, imputado por revelación de secretos», ha reprochado el portavoz del Grupo Parlamentario Popular en el Congreso, Miguel Tellado, al presidente, durante su pregunta al ministro del Interior. Y es que en plena sesión de control se ha conocido la imputación del fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, que ya fue reprobado por el Senado.«Un bulo»A esta cuestión se han referido también los populares Mirian Guardiola y Borja Sémper, pero ni Bolaños ni Alegría se han pronunciado al respecto. Gamarra ha cargado contra las «comisiones, mariscadas, chalés de lujos gratis, amantes con sueldo público e infiltrados en la Guardia Civil» del caso Koldo y, también, contra las supuestas bolsas de dinero que llegaron a Ferraz, la sede socialista, según el testimonio anónimo a un periódico digital que ha provocado que el PP se querelle contra el PSOE por presunta financiación ilegal. Este último extremo, al que también se ha referido la portavoz de Vox en el Congreso, Pepa Millán, ha servido a Montero y a Bolaños para acusar a la oposición de utilizar «un bulo». «¿Hay alguna prueba, algún indicio, alguna mención en el informe de la UCO? Ninguna. Pero ustedes lo utilizan. Han tenido el descaro de presentar una querella falsa por un bulo. Es el ciclo del bulo», ha clamado Bolaños, en una sesión casi monográfica sobre la corrupción. «El presidente del Gobierno se ha ido corriendo antes que nunca. Después de muchas sesiones, el presidente hoy ha salido a defenderse, no a atacar. Por algo será», ha sentenciado el popular Bendodo.
Fuente ABC