Este sábado dan el pistoletazo de salida las fiestas de Moros y Cristianos de Valera de Abajo , un pequeño pueblo conquense de unos 1.500 habitantes que el tercer fin de semana de enero de cada año congrega desde hace siglos a vecinos y curiosos para disfrutar de esta festividad declarada hace dos años de Interés Turístico Regional por el Gobierno de Castilla-La Mancha .Esta tradición, cuyos orígenes se remontan al siglo XVI, saca a la calle a un nutrido grupo de hombres que, ataviados con bellos y coloridos trajes, se transforman en actores de una fascinante narración que mezcla historia, cultura y religión, al rememorar épocas medievales, cuando la Península Ibérica estaba dividida entre los reinos musulmanes al sur y los reinos cristianos al norte, y marcada por la devoción al Santo Niño, patrón del pueblo .Una de las partes más emocionantes de la festividad es el desfile y la recreación de las batallas entre los moros y los cristianos, con una representación teatral en la que los participantes se lanzan al combate con espadas, en un espectáculo de pólvora y estruendo que llena el aire con la emoción de la batalla. Algo que ha permanecido inamovible, sin ningún cambio hasta este año, cuando un grupo de mujeres se ha movilizado para reclamar su participación en este evento.Una iniciativa que se ha conocido esta semana, cuando los promotores, o mejor dicho promotoras, bajo el nombre de Moras y Cristianas Valera, la han publicado en la plataforma change.org para recoger firmas a favor de la misma, con la que ya han recabado más de 300 apoyos con el objetivo de llegar a los 500 . Unas reivindicación que comenzó hace un año, sin que de momento hayan tenido respuesta alguna por parte de los organizadores de la fiesta.Noticia Relacionada estandar No Los Moros y Cristianos de Las Valeras, declarada Fiesta de Interés Turístico Regional por la Junta ABC Estas fiestas, llenas de batallas simuladas, procesiones y eventos festivos, rinden homenaje al proceso histórico por el que los reinos cristianos recuperaron gradualmente los territorios ocupados por los musulmanesIrene Chumillas es una de las portavoces de ese pequeño grupo de mujeres que ahora pide «igualdad» para poder participar en el evento central de los Moros y Cristianos de Valera de Abajo, que es su desfile. «Nosotras no queremos enfrentamiento ni polémica, sino diálogo y ser escuchadas para hacer más grande nuestra fiesta», asegura.Para ello, desde este colectivo han mantenido reuniones con el alcalde de Valera de Abajo y diputado nacional del PP, Daniel Pérez, y con el cura de la localidad, José María Martínez, además de pedir un encuentro a la junta directiva de la Asociación Dulce Nombre de Jesús , organizadora de la fiesta, sin que de momento haya sido posible.«En pleno siglo XXI, las mujeres de Valera de Abajo seguimos siendo excluidas de participar activamente en estas fiestas como soldados. Aunque nuestro papel es fundamental en la organización y desarrollo de las mismas, no se nos permite desfilar al igual que los hombres», se queja la representante de esta iniciativa, que pone como ejemplo para ello a otros movimientos similares que consiguieron sus objetivos, como en el caso de la Semana Santa de Cuenca u otras fiestas de Moros y Cristianos del Levante español.«Sabemos que los cambios en las tradiciones cuestan y llevan su tiempo, y más en un pueblo pequeño», afirma Irene Chumillas , que apunta además que en los estatutos de la Asociación Dulce Nombre de Jesús, que se guardan en el Registro Civil de Castilla-La Mancha, no se hace mención alguna a que sean sólo hombres los que participan en los eventos de la fiesta.Sin embargo, la junta directiva de la asociación está en visos de disolverse tras la última asamblea celebrada y son los generales de las agrupaciones de moros y cristianos las personas que se encuentran al frente de la organización del evento, pero ABC no ha podido contactar con ninguno de ellos para conocer su opinión acerca de este asunto. Algo sobre lo que sí se ha pronunciado Daniel Pérez, alcalde y además soldado cristiano durante las fiestas , quien en declaraciones a este diario ha dejado clara su postura: «Yo soy una persona joven, de 35 años, y desde hace tiempo vengo defendiendo que las mujeres puedan participar activamente en la celebración, tanto en el desfile como en el resto de actos, aunque no me corresponde a mí decidirlo porque no son unas fiestas patronales».Desde la Consejería de Igualdad del Gobierno de Castilla-La Mancha se muestran «respetuosos» con esta festividad local y provincial, pero son tajantes con el hecho de que «las mujeres deben estar presentes en las realidades sociales, culturales y de todo tipo, en espacios libres de exclusión hacia ellas y en condiciones de igualdad».Del mismo modo se ha manifestado sobre este asunto el cura del pueblo, José María Martínez , quien cree que las representantes de esta iniciativa «no quieren un no por respuesta» y que la otra parte, los organizadores del evento, tampoco quieren sentarse a hablar con ellas. «Son dos contrarios que no están dispuestos a entenderse», en opinión del párroco, que considera, en cualquier caso, que «la mayoría de vecinos está en contra de que haya cambios en la tradición».«Yo hablo con todo el mundo, como deberían hacer los actores implicados en este asunto, pero sí es cierto que Valera de Abajo, al igual que otros municipios del medio rural, tiene necesidades más importantes que las fiestas de Moros y Cristianos, como es que lleguen ayudas de las administraciones para las zonas despobladas», concluye el regidor valeroso, que este fin de semana se volverá a vestir de soldado cristiano para una gran celebración, en la que no sabemos si en el futuro estarán presentes las mujeres.
Fuente ABC