Hay tragedias que refuerzan alianzas, crean otras o distancian posturas. El Foro ABC escenificó este jueves, precisamente, una unión que no nace tras la dana, pero que tuvo en los momentos posteriores a las catatróficas riadas del 29 de octubre el mejor de los entendimientos. María Jose Catalá, alcaldesa de Valencia, visitó la sede de Vocento junto a José Luis Martínez-Almeida, alcalde de Madrid, la ciudad, en palabras de Catalá, «más cercana y más hermana» de los municipios gravemente afectados por las inundaciones. Los alcaldes de Valencia y Madrid protagonizaron la última edición del Foro ABC solo 24 horas después de que por esta Casa pasara el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno. En esta ocasión, con el foco puesto en lo local, pero con la misma preocupación por la deriva institucional del Gobierno de Pedro Sánchez. Del mismo modo que agradeció a Almeida su ayuda en los peores momentos, Catalá afeó al presidente del Gobierno su «falta de empatía» y su ausencia durante casi tres meses, desde que el pasado 3 de noviembre fuera increpado en su visita a Paiporta.La alcaldesa de Valencia acabó su intervención como la empezó, agradeciendo el apoyo de las comunidades y ayuntamientos, reclamando ayudas urgentes para los afectados y reprochando al Gobierno central su nivel de implicación tras la tragedia. Recordó que su municipio es el tercero con más fallecidos como consecuencia de las riadas, pese a que no se tiene en cuenta como tal, tampoco desde el Ejecutivo central. Con todo, la regidora de Valencia denunció que ni del presidente del Gobierno ni ningún otro miembro del Consejo de Ministros, tampoco secretarios de Estado, le han llamado para preocuparse por la situación de las pedanías afectadas.Noticia Relacionada estandar No Catalá limitará al 2% los pisos turísticos en cada barrio de Valencia Toni Jiménez La alcaldesa de la capital del Turia anuncia en el Foro ABC una nueva regulación que pretende agrupar estas viviendas en bloques completosCatalá reiteró que la provincia necesita ahora «mucha ayuda» para revertir ese «escenario de guerra» en el que se convirtieron municipios enteros, donde aún a día de hoy se hace necesario limpiar el barro o retirar los coches apilados. «Es inimaginable lo que nos va a costar sobreponernos a esta dureza, pero hay que hacerlo. Tenemos que sobreponernos y, desde luego, en Valencia entendimos desde el primer momento que teníamos una responsabilidad con nuestra área metropolitana», señaló a preguntas del director de ABC, Julián Quirós.En esa línea, urgió la «ayuda y empatía» del Gobierno de España para llevar a cabo la reconstrucción de las zonas afectadas. En concreto, demandó la actualización de los ingresos a cuentas de las administraciones locales, la devolución de las aportaciones de 2023 y el cumplimiento del incremento del 13% comprometido por la ministra de Hacienda, María Jesús Montero. Por todo ello, cifró en 80 millones de euros «lo que va a costar al Ayuntamiento de Valencia» ese incumplimiento del Gobierno.No es muy «optimista», por tanto, con que el Ejecutivo central cumpla con lo prometido y entregue en tiempo y forma las ayudas anunciadas para la Comunidad Valenciana. Denunció, además, las «trabas en el camino», para ella «incompresibles», en los momentos posteriores a aquel tráfico 29 de octubre. «Me llegó un correo electrónico del secretario de Estado de Interior diciendo que no podía sacar a la Policía local de Valencia al municipio de al lado a ayudar. Me recordaba cuál era mi territorio. Es decir, no estás para ayudarme, no llegan las ayudas, no vienes y es que, además, me impides, me amenazas y me prohíbes ayudar a un pueblo vecino», criticó.Mientras eso ocurría, el Ayuntamiento de Madrid «mandaba hasta 1.000 efectivos durante semanas y semanas para limpiar el barro de Valencia», según aseguró Catalá en presencia de José Luis Martínez-Almeida. «Tengo que agradecer aquí, públicamente, que el pueblo español, las comunidades autónomas y los ayuntamientos estuvieron donde no ha estado el Gobierno de España y el presidente del Gobierno de España», reprochó la alcaldesa de Valencia al Ejecutivo central, al tiempo que agradeció al conjunto de los españoles su generosidad los momentos más difíciles de la historia reciente de la Comunidad Valenciana.Criticó también la «falta de diligencia clara de varios organismos», así como que, en el momento de las inundaciones, el sistema de monitorización de los barracos de la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) no fuera uno «completo que pudiera adelantarse y prever con exactitud por donde iba a ir el desbordamiento». A ese respecto, aseguró que «la Confederación dejó de hacer un trabajo ingente en los últimos años». Con todo, recordó algunas de las palabras de los vecinos de localidades damnificadas —«Ya tenemos demasiado barro como para que alimentéis el barro político»— e instó a priorizar el pago de las ayudas por la «incentidumbre absoluta» en la que viven los afectados.La alcaldesa valenciana repasó el largo listado de retos futuros de la ciudad, ahora más difíciles si cabe tras el paso de la dana, como son abordar unas nuevas infraestructuras hidrológicas, recuperar la Albufera como «el gran humedal patrimonio ecológico» y el «ansia», como lo calificó Catalá, de proteger la Huerta de Valencia. «Después de esta dana, las dificultades son mayores, pero también las oportunidades. Valencia tiene la oportunidad de asumir unas nuevas infraestructuras hidrológicas, de reflexionar y volver a hacerlo bien, como lo hizo hace 60 años con el desvío del cauce del río Turia, creando el Plan Sur y generando infraestructuras de primer nivel», explicó la regidora en el Foro ABC.
Fuente ABC